Capitulo 1

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Una hermosa eriza de pelaje rosado espera pacientemente el resultado de su trabajo, ha tardado toda una semana, esta ha dos meses de graduarse y debe esforzarse para conseguir su titulo.

-Felicidades Amy, tu trabajo es excelente, como siempre- dice una coneja de pelaje color crema y flequillo color zumo.

-¿Usted cree que pueda graduarme?- pregunta la eriza emocionada y con un brillo peculiar en sus ojos color esmeralda.

-Pues claro mi niña- la coneja ríe y lleva su mano hasta su boca, se escucha el chirrido de la puerta, una conejita pequeña entro dando brincos con una radiante sonrisa, es idéntica a su madre, pelaje color crema, cabellera color zumo y ojos color chocolate.

-Perdón por interrumpir... Pero tienes una llamada Amy- la conejita le da el celular a Amy, que minutos antes se lo había prestado para que jugara Candy Crush, la eriza se queda un momento viendo el celular.

-Que extraño... ¿Quién será?- sin mas demora la chica contesta con esa dulce voz que tiene -Bueno-.

-¿Señorita Rose?- dice la voz al otro lado de la línea.

-Si, ¿Quién es?- pregunta Amy al no reconocer la voz.

-Su padre esta en el hospital, puede venir por favor- pide la voz, Amy se queda con los ojos como platos, su respiración se acelera un poco.

-Mi padre... Voy para allá- la eriza cuelga y guarda el celular en su mano, las conejitas la ven con preocupación.

-Ya tengo que irme, nos vemos- dice Amy sonriendo y sale a paso   velos directo al hospital.

...

Espero desesperada a que alguien me explique que pasa con mi padre, hace media hora que llegue y nadie me dice nada, una equidna uniformada se me acerca, me pongo de pie rápidamente.

-¿Como esta mi padre?  ¿Qué le paso?- pregunto desesperada, la enfermera de pelaje naranja ve unos papeles que tiene en sus manos.

-Bueno... Los resultados de los estudios que se hizo su padre, diagnosticaron que el tiene... Cáncer- contesta la equidna, mis ojos se inundan de lagrimas, pero me niego a dejarlas caer, un nudo empieza a formarse en mi garganta.

-Cáncer... No puede ser- digo con la voz entrecortada, la enfermera pone su mano en mi hombro y me sonríe tristemente.

-Señorita debe pagar el tratamiento si quiere que su padre siga aquí, si no paga en dos días lo sacaremos de aquí- explica la enfermera y se retira caminando por el pasillo.

-Yo no tengo el dinero suficiente- las lagrimas empiezan a correr por mis mejillas, caigo de rodillas al piso, cubro mi cara con mis manos, seguro que mi llanto se escucha por todo el pasillo, siento una mano posarse en mi hombro, volteo y me encuentro con unos hermoso ojos color celeste.

-No llores, lo he escuchado todo sin querer y conozco a alguien que puede ayudarte- dice la seedrian con una cálida sonrisa, paso mis manos por las lagrimas para quitarlas, me pongo de pie y veo los ojos celeste de la chica.

-Háblame mas sobre el o ella- pido, la chica afirma con la cabeza, toma aire y empieza a hablar.

-Su nombre es...-.

Shadamy -Amor o Deseo-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora