Uno.

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—¿Cual es mi horario?

—Desayuno, economía, administración, historia del reino, un descanso de 30 minutos, la comida, contabilidad, relaciones internacionales, Francés, y la cena, princesa.

—Gracias, puede retirarse.

—Con su permiso alteza.

Otro día mas, más deberes, pensaba Elsa, ser la princesa primogénita era lo mas agobiante que podría experimentar, pero no podía quejarse, era su deber, tal vez Arendelle no era un reino tan grande, pero era próspero, hacia tratos por todo él mundo y no tenia enemigos, se caracterizaba por la variedad de naturaleza que tenia y los peces que nadie mas tenia, solo producían cosas caras, con buena calidad, y eso les dio mucha fama alrededor del mundo como uno de los sitios mas visitados por él mundo, seguían siendo monarquía pero no era algo que a los ciudadanos les molestara, era unos de los países con mayor calidad de vida, para todos Arendelle era un paraíso, menos para Elsa, ya no lo veía como un hogar lo veía como una prisión, nunca salia del castillo, sus padres lo tenían prohibido, y ella no podía hacer nada, todavía tenia 17, su vida era una rutina, conocía él castillo mejor que todos los sirvientes, y conocía todo Arendelle sin tan siquiera a verlo visto en persona.

Su hermana era tan suertuda.

Después de tomar un baño y ponerse él vestido asignado para ese día con ese apretado corset de siempre se dirigió al comedor principal para tomar él desayuno con sus padres, que ya estaban sentados esperando a Elsa para tomar él desayuno.

—Buenos dias, perdonen la demora, he tendió que revisar algo primero.

—No te preocupes querida, Miriam puede servir él desayuno. —Dijo la Reina.

—Claro su alteza.

—Buenos días Elsa, ¿Como has amanecido hoy? —Dijo su padre, él Rey.

—Bien, y ¿ustedes?

—Bien hasta que oímos las noticias de tu hermana, fue suspendida por 2 semanas antes de las vacaciones de verano, no puedo creerlo, esto es inaceptable.

—Adgar, no seas tan duro con la niña, ella solo esta confundída.

—¿Por que exactamente? —Pregunto Elsa un poco intimidada.

—Por mal desempeño escolar, faltas, y mal comportamiento.

—Oh, eso es grave, ¿entonces Anna regresara? —Pregunto Elsa dudosa.

—Por supuesto que si, esta castigada, hable con ella y le envíe un boleto, y le cancele las tarjetas de crédito, no tiene otra opción.

—No debes castigar tanto a la niña, solo esta un poco confundida y no sabe que hacer debes de darle tiempo. —Esta vez dijo la Reina.

—Lo que ella necesita es un propósito.

Y la discusión siguió y siguio, pero Elsa ya no prestaba atención, a ella solo le importaba Anna, la extrañaba mucho, ella era como su salvación cuando se sentia mal, ella la hacia recordar que ella es una adolescente no una adulta, sin ella todo era tan gris, tan triste, a veces solo necesitaba su compañía para dejar de sentirse como un pájaro que quiere volar pero esta atrapado en una jaula.

Sirvieron el desayuno, comieron, y todos fueron a hacer sus actividades para él día del hoy, Elsa tenia maestros de universidades prestigiosas enseñándole solo a ella, era una estudiante prodigio nunca los contradecía ni desobedecía, y eso impresionaba, ante él mundo Elsa era la princesa mas perfecta, toda una inspiración.

En algun modo Elsa sentia que era su responsabilidad ser esta chica perfecta todos piensan que es, hacer lo que le dicen sin renegar, y governar el reino como sus padres lo hicieron antes y seguir el legado que a sido destinada a tomar hasta antes de haber nacido.

El día continuo como todos los demás días, Elsa estaba apunto de perder la cabeza cuando..

—¿Desde hace cuando tiempo somos aliados con Corona?

—interrumpiendo — Princesa, su hermana está en el teléfono.

—Gracias, lo siento tengo que ir, esto es todo por hoy, nos vemos mañana. —dijo y salió lentamente, hasta que nadie la veía empezó a correr, Anna era su única conexión al exterior, y hace días que no le hablaba, ahora más que nunca la necesitaba.

—¡Anna! Dios mio, ¿porque te suspendieron?

—Bueno es una larga historia... que te contaré mañana cuando regrese, sólo quería decirte que ¡no fue mi culpa! Y creo que también se escapó algo y algunas personas saben que soy una princesa...

—¡Anna! Sabías que no tenías que decirle a nadie por tu protección—interrumpida.

—¡Lo se! Se me escapó cuando un chico me hizo enojar, lo siento en serio! Porfavor no le digas a Mamá y Papá! Me matarían más de lo que ya lo van a hacer.

—Ugh okay, pero si sigues así ya no te van a dejar regresar y te quedarás estancada aquí como yo.

—No te preocupes hermanita yo siempre tengo un plan.

Él día termino, Elsa estaba cansada, pero eso no la detuvo, había un lugar donde había ido de pequeña, un lago, un poco lejos del castillo, era un lugar hermoso, personas de todos lugares oian de ese especifico lugar donde se decia que era magico, Anna siempre lo creyo desde nina, pero Elsa sabia que la magia no existia, tal vez no habia de ese tipo de magia pero ese lugar era especial para Elsa, era su escape, y ella iba a ir sin importarle que tan cansada estaba, se cambio a un tipo de ropa mas casual y moderna con una sudadera azul y se escabulló por él castillo, estaba mas frío que en cualquier dia en Arendelle ya que era verano, y el cielo se veia estrellado, mas de lo normal corria por él bosque a donde se encontraba él lago, se veia mas hermoso que ningun otro dia, el cielo estaba reflejado en el agua y en ese momento Elsa creyo en la magia

—Yo se que estoy loca... pero deseo ser libre, sentirme feliz tan siquiera por unos cuantos meses; o tal vez ser como Anna solo por unas semanas, salir, viajar, conocer, vivir, solo por un momento.

Y con esas palabras algo cambio en las paginas del destino. Tal vez ella tambien pueda tener su final feliz.

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⏰ Última actualización: Mar 29, 2018 ⏰

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Un Tiempo Divertido Juntos  [Jelsa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora