(8 de septiembre)

53 4 0
                                    

18:03 hrs.
¿Quién eres? No te reconozco.
Conozco tu rostro, lo sostuve entre mis manos alguna vez.
Conozco tus manos, las estreché en días fríos, lejanos a este.
Conozco tus ojos, los vi brillar cuando decía "te amo", los vi llorar cuando dije "te odio".

Pero, ¿quién eres?
Eres la sombra de lo que solías ser, eres apenas un atisbo del chico misterioso que me sonreía. No sé que hay en tu interior. Y todo tu cuerpo grita, anhela desesperadamente algo, aunque sea una mínima porción de seguridad de la que poseía antes. Antes.  Cuando estábamos seguros de quiénes éramos y no teníamos que estarle preguntando a extraños. Te conocía a la perfección. Pero ya no.
¿Sabes?, antes solía encontrar paz, amor, felicidad, y todo lo que deseara en tu voz y tus ojos. Te veía al interior y te reconocía. Hasta el más recóndito de tus rincones no se escapaba de mi. Hablábamos por miradas. Conocía todos tus gestos, expresiones y ademanes. Tuve la gracia de poder examinar tu alma. Tu bondadoso y sensible corazón. Antes. Ahora te veo, pero ya no te veo. Sólo veo un chico.

¿Quién eres? Respóndeme. (No lo harás). Solía pensar que sabía quien eras, ahora eso ha cambiado un poco.
Quisiera que no fuera así. Quisiera que el chico del que estuve, (¿o estoy?) enamorada existiera. Porque sinceramente no sé si existió. No sé si fuiste real.

¿Te habrás perdido?
En algún lugar recóndito de tu ser, existes tú. Mi chico misterioso. A ti te he estado buscando. Pero has sido poseído por el cuerpo de alguien igual a ti.
Tiene tu rostro, pero yo sé que no eres tú.
Tú me sonreías al pasar. Tu eras noble y amoroso, detallista, honesto y guapo. ¡Uf, sobre todo eso último! Tu poseías la capacidad de enfermarme y curarme. Sólo tu. Tú me besabas, acariciabas, mimabas y protegías. Tú.

Sé que lo eché a perder. Sé que actué de acuerdo a mi edad y no medité mis acciones. Me faltó madurez.
Pero hoy, cuando te vi y me viste, lo supe con certeza: ya no te conozco.

Me amabas.
Lo eché a perder.
Me querías de todas formas, con mis demonios y temores. Pero la persona que me amó y quiso, no es aquella que vi a la entrada de tu casa. Ese no eras tú, chico misterioso. Vi a un impostor. Te robó el rostro... Esa carita de ángel que tanto estimé. Te paso el dato para que dejes una denuncia.

¿Te habrá secuestrado?

Te encontraré chico misterioso. Tú existes por alguna razón. Tal ves yo hice que te secuestrara y se adueñara de tu rostro, tal ves mudó de forma mental para protegerse de mí. De mi otro yo, que no soy yo. Porque al igual que tú, ya no me reconozco. Y es que la persona que escribe estas líneas también se transformó, y tuvo que adecuarse a su entorno.
Pero de igual manera, soy capaz de verme al espejo y saber que mi transformación fue una y única.
Pero tú, mi chico misterioso, estas encerrado en ese cuerpo embaucador.

Reconozco tu cuerpo, sé como te mueves.
Reconozco el lunar bajo tu ojo izquierdo, sé el significado te de tus miradas.
Reconozco el tacto de tu rostro junto al mío, lo he sentido en mis asaduras.

Pero no te encuentro chico misterioso. Debes estar en algún lado. De todos modos, no estas muerto, sino encerrado. Buscaré la forma de liberarte. Si yo impuse el hechizo, yo lo podré quitar. Te despojaré del farsante que lleva tu nombre. Te liberaré.

L O  P R O M E T O. 💕

Mi chico misterioso. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora