Lo que empieza jugando termina gustando.

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Todo comenzó molestando a mi prima Lucia con mi vecino, a cada momento le mencionaba su nombre creyendo que a ella le gustaba pero al parecer no era así pues no  me prestaba atención.

Todo se volvió extraño al cabo de varios días. ¿por que? porque me fije en lo lindo que era, me di cuenta que me ponía nerviosa con solo escuchar su nombre, porque no le quitaba los ojos de encima cuando pasaba por enfrente de mi casa.Nunca supe porque.

Una tarde mi mejor amiga Andrea llego a mi casa, nos sentamos en la terraza y cinco minutos después de habernos sentado pasa Jhoan (mi vecino) por mi casa, no pare de mirarlo; tan mala fue mi supuesta "disimulación" que Andrea me pregunto. -¿te gusta Jhoan?. Lo negué con una mueca; ella se quedo mirando con cara de "no te creo", lo ignoro. Jhoan luego de aproximadamente dos minutos volvió a pasar por mi casa intente disimular pero fue en vano, Andrea se  dio cuenta y le escribió.

JHOAN:

-Hola

-Hola

-Te puedo hacer una pregunta?

-Si claro, adelante

-¿Que tal te parece Mayra?

-¡¿Que?! jajajaja la verdad es que no se, porque no he entablado una conversación con ella

-Amm ya

-¿Por que la pregunta?

-Nada solo curiosidad

visto a las 13:04

Al día siguiente por la mañana Jhoan toco la puerta, mi mama sin preguntar quien era, el le dice:

-Buenos días señora Karen

-Buenos días,¿que necesitas?

-¿Esta Mayra?

-Ya le digo que venga

-Ok                                                                                                                                                                                                                                                                              

Mama grita -¡Mayra te buscan en la puerta!. Yo sin saber quien me buscaba salgo de mi habitación todavía en pijamas -Hola Mayra, ¿te levante?, dijo Jhoan. Sin alzar la cabeza supe que era el y salí rápidamente dirigiéndome a mi habitación. -Tiene pena, no quiere salir vuelve mas tarde -dijo mi mama. Nunca regreso.

Me senté en mi cama a pensar -¿porque me había dado miedo hablar con el?, ¿porque no pude mirarlo a los ojos y preguntarle?: ¿para que me buscabas? mi cabeza se lleno de preguntas que ni yo misma las pude responder, me acosté mirando a los dibujos que estaban pintados en el techo de mi habitación, eran una mujer y un hombre que se demostraban su amor sin decir ninguna palabra solo mirándose a los ojos sabían que sentían uno por el otro, al recordar lo que había sucedido quise ser la mujer de aquel dibujo pero luego de un rato admirando la pintura regrese a la realidad y me dormí.

Me enamore por primera vezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora