Una tarde decidí soltar a keylin, ya sentía que confiaba en mi, ya era mía, tome un cuchillo y corte las sogas, se levantó con trabajo, sentada ya tres semanas, me abrazo.
La metí a bañar, le cure sus heridas, la alimente, nos acostamos juntos.
Ya habían pasado dos semanas, ella ya se movia más, pero no había intentado escapar, eso me gustaba creía que ya estaba completamente pérdida por mi.
Una noche hicimos el amor como nunca, le quite las grapas, la bese como nunca, nos acostamos a dormir, me perdí completamente en mi sueño. Al abrir los ojos no podía creerlo, keylin no estaba, corrí y la busque por toda la casa, me desilusione, al abrir la puerta, para salir a buscarla, mi hogar estaba rodeado de patrullas y policías, asustado me metí corriendo, baje al sótano, me diriji a donde estaban mis padres, me inque les pedí perdón, el error fue haberme enamorado, me disculpe por haber golpeado, torturado a keylin, pero ante todo me sentía arrepentido de haberme enamorado, listo para salir y entregarme, tres policías entraron, me golpearon contra el piso y me esposaron, salí con la cara en alto,
Vi a todos mis vecinos salir, asomarse, me sentí orgulloso, yo sabía que no era un hombre malo.
El padre de keylin corrió a mi rápidamente y me golpeó hasta que unos policías lo detuvieron, lo que más me dolió fue su mirada de keylin, de odio, desprecio, completamente vacía, me llevaron en la patrulla.
Me golpeaban a cada rato y me tenían enjaulado hasta el día de mi juicio, no podía ver a keylin, porque ella me traiciono, ella fue mi primer amor, yo que la amaba.
