Apocalipsis Zombie || AU (Larry Stylinson) (Ziam)(Mpreg)

Epílogo

5 años después.

Mundo 21/03/2020

Han pasado cinco años ya desde aquella tragedia global, donde las esperanzas eran mínimas, cinco años donde miles de personas se convirtieron en otras, cinco años desde que el Apocalipsis Zombie comenzó.

Fue devastador las pérdidas, pero poco a poco y gracias a los científicos que trabajaron sin descanso durante alrededor de un año, las cosas cambiaron.

La cura fue hallada, y la población fue salvada.

Las fuerzas especiales tomaron cartas en el asunto y la epidemia fue disminuyendo constante aunque paulatinamente.

Todo volvía a la normalidad, toda la gente se ayudaba mutuamente, aún había destrozos por doquier, pero éstos iban desapareciendo conforme el tiempo transcurría.

Tal parece que aquel quien la mayoría lo conoce como Dios, le dio una segunda oportunidad a la humanidad.

Los Ángeles, California.

Dos pequeños niño jugaban en la arena de una hermosa playa, su padre los observaba desde unos cuantos metros para cuidar de que nos le pasara nada.

Harry veía a sus dos retoños con una sonrisa en sus labios.

-¿Harry?- Oyó como lo llamaban.

-Aquí estoy amor.-Dijo después de reconocer la voz que le hablaba.

La puerta corrediza que daba a la playa se abrió y de ahí salió un moreno sonriéndole al rizado.

El rizado feliz se levantó de la silla en la que estaba sentado y abrazó al hombre que hizo acto de presencia.

-¡Zayn! Hola.-

-Hola Harry, ¿Cómo estas?-

-Muy bien, ¿Qué te trae por aquí? hace como un mes que no nos vemos.-El rizado no esperaba esa visita, pero fue de su total bienvenida.

-Si ya lo sé, es que ya sabes, con eso de los trámites para la adopción es un poco tardado y tedioso, pero por fin ya se terminó, por fin Lizzy ya será parte de nuestra familia en dos días.-

Harry chilló de la emoción.

-¡Felicidades!, ¿Y donde esta Liam?-Preguntó el menor curioso, sin despegar un ojo de sus pequeños.

-Está en la sala, con tu querido esposo.-Sonrió Zayn.

-Ahora que me lo recuerdas, hace unos segundos me había llamado.-Comentó inconscientemente Harry.

-Si, es que llegamos de sorpresa y él no sabía donde estabas, por eso te llamó, para encontrar tu ubicación.-Dio una pequeña risita el invitado especial.

-¡Tío Zy!-Gritaron al unísono los adorables retoños de Harry que abrazaron al moreno al ver su inesperada visita.

La puerta deslizable nuevamente se fue abriendo dejando a la vista a una nueva pero conocida persona.

-¡Tío Li!-Otro grito por parte de los infantes se hizo escuchar al igual que una lluvia de abrazos.

-Mis sobrinos favoritos.-Dijo divertido Liam.

-Es porque somos los únicos.-Respondió tropezando un poco con las palabras una adorable chiquilla de cabellos ondulados hasta los hombros, y de una hermosa mirada azul.

-Es cierto tío Liam, eres un poco tontito.-Secundó un jovencito parecido a la niña pero de cabello lacio corto  y con unos penetrantes ojos verdes.

Los adultos presentes soltaron una carcajada por los comentarios de los más pequeños.

-¿De que se ríen?-

Otra integrante hizo acto de presencia.

-¡Papi!-Digno de aquellos gemelos, un tercer chillido se escuchó.

-Hola mis bebés.-El rubio cargó a sus retoños y se dirigió hasta su esposo a quien saludó con un beso casto en los labios.

-Hola amor.-Le susurró al oído a su amado esposo.

Después de unos minutos los cuatro adultos tomaron asiento en la mesa para seis personas que se encontraba ahí mismo, disfrutando de la brisa marina y de una conversación animada, mientras que los niños continuaron jugando en la arena a un metro de sus padres.

-Sigo sin saber del por qué de tu cabello.-Zayn comentó riendo levemente cambiando de tema.

-Es culpa del maldito de Niall.-Comentó aquel rubio.

-A ver, me perdonas pero no fue mi culpa que perdieras esa apuesta.-El recién nombrado aparecían con una enorme sonrisa en sus labios.

-¡Tío Ni!-Como anteriormente ocurrió los gemelos vociferaron, recibiendo a su tío número 3.

-Por Dios, ¿Acaso no dejarán de salir personas nuevas de adentro de la casa? Estoy a punto de perder mi sentido auditivo.-Comentó divertido el rizado, pues sus bebés gritaba siempre que alguien nuevo aparecía, todos rieron ante el comentario.

Todos pasaron una tranquila y divertida tarde, disfrutando sin pensar en problemas simplemente solo atrapando el momento.

Los invitados tuvieron después de un tiempo tuvieron que marcharse a sus correspondientes hogares, agradeciendo la estadía y prometiendo que al día síguete tendrían que juntarse nuevamente.

Ahora la pareja de esposos-padres estaban a la orilla de la cristalina y mansa agua, sosteniendo cada uno entre sus brazos a uno de sus amados bebés los cuales estaba derrotados durmiendo reposando sus cabecitas en los hombros de sus papis.

-No sabes cuánto te amo Harry.-

-No sabes cuánto te amo Louis, me gusta que seas rubio de bote igual que Niall.-Bromeó el rizado con sus ojos iluminados a causa de su extrema felicidad, aún teniendo en sus memoria aquel momento en que casi perdía al amor de su vida, pero siendo opacado por todas aquellas bellas anécdotas que pasó junto a éste.

Louis simplemente sonrío y besó con un inmenso amor a su hermoso esposo mientras éste le correspondía siendo abrazados por la luz en tonos anaranjados del atardecer.

Aquellos cinco personajes, que se cruzaron de maneras extrañas, pasando por muchas aventuras que marcaron aquella enorme amistad que hasta la actualidad poseían y que no permitirían romper. Superando las adversidades y resolviendo todo de manera correcta, estos cinco amigos que lograron lo que muchos no consiguieron...

Sobrevivir a un Apocalipsis Zombie.

~Fin~