Capítulo 3

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-¡Que me dejes joder, que no te soporto, vete ya a tomar por culo! -chillé cabreada bajando las escaleras de mi casa.

-¡Oye chava a mi no me hables así, no soy un perro para que me estes faltando al respeto! Si Rich dijo que te cuidara, te intentaré cuidar. -decía Jos detrás mio.

-¿¡Cómo que intentaré!? Si a ti te dijo Rich que me cuidaras, no lo intentes, lo haces. Ademas, ni que necesitara niñero para que me estes cuidando.

-De verdad eres una niñita. No te soporto, desde que te llamé fea ayer no paras de molestarme.-me dijo, y la verdad es que me cabreó un monton.- ah, y tenía razon, eres fea.

Me paré en seco mientras iba al sofá gris que se situaba en el salon, para irme para cocina. Llegué, cogí un vaso de agua con jabon, y me dirigí hacia Jos, pero antes de ir a buscarlo, con cuidado puse el agua detras mio.

-¡Jos! -chillé.- ¡Socorro!

-¿Que pasa? -preguntó desinteresado, así que por el gesto que hizo y mas porqué me llamó fea, le tiré el agua con jabon en la cara.- ¡Anaaaaaa! -y empecé a reir.

La risa, joder. La risa que me entró, me estaba descojonando descontroladamente, con el miedo de su reacción, empecé a correr como su viera el ultimo helado en un supermercado. Corrí hacia las escaleras, las subí lo mas rápido posible, y lo unico que se me ocurrió es esconderme en la ducha.

No se escuchaba ni a nada ni a nadie, asi que lentamente entre en la ducha, porque es que no me queria esconder detras de la puerta, estaba oscuro, no veia ni escuchaba a Jos. Cuando menos me lo espero, un gran chorro de agua me cae en todo el cuerpo. Mi reaccion solo fue chillar y cagarme en todo lo cagable. Solo tenia una cosa en mente, y es vengarme de Jos.

Así que, abrí la 'persiana' de la ducha, y vi a Jos descojonandose de la risa en silencio. Cogí la 'manguera' de la ducha, encendí el grifo y le tiré el agua. Ahí fue cuando se le acabó la risa.

-¿Hola?-escuchamos una voz conocida.

-Mierda mierda mierda.-dije.

-Vamos, vamos, ayudame a recoger las cosas del baño.-ofreció Jos.

-Que mas da, si nos han pillado ya.

-¡Jos, Ana, bajen ya pero ya! -chilló Rich cabreado. Jos y yo nos miramos, y apenados bajamos hacia abajo. Cuando bajamos, vimos a Rich de espaldas mirando la ventana.- ¿Se puede saber que es todo este desorden?

-Perdoname Rich.-dijo Jos, le miré mal.- perdonanos.

-Ir limpiando todo esto.-nos ordenó Rich.

Y así lo hizimos.

Inesperado || Jos CanelaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora