My Favourite Boy

Capítulo 3: compañeros

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Me senté en mi asiento dispuesta a dar mi clase. Poco después entró el chico con el que se estaban metiendo mis amigos. La verdad es que si se quitaste todo ese look sería bastante guapo. Me suena de algo y no se de que. Me recuerda al niño con el que jugaba todas las tardes cuando iba a la casa de mi abuela. Él me ayudaba, me cuidaba y me hacía reír. Acabe enamorando de ese niño hasta que me mude a otra ciudad y ya nunca lo volví a ver. Dos años después volví aquí pero cuando iba a casa de mi abuela el niño y su familia se habían mudado a otra casa. Ni siquiera sabía su nombre. Creo que era algo como Harold o Hemming o algo así. Bueno, pues fue mi primer amor y me encantaría volver a verlo. No para salir con él, si no para recordar que me enamoró de ese niño de ojos color esperanza. Era muy guapo, seguramente ahora tenga a muchas chicas detrás de él. Pero ¿por qué ese chico me recuerda al niño de mi infancia? ¿Será él? No, no lo creo. Él es... bueno diferente. No quiero llamarlo como mis amigos pero es un poquito "nerd" y mi niño no era para nada así.

-Chicos deberéis hacer un trabajo en parejas sobre la historia de Cristóbal Colón y su descubrimiento de América. Tenéis todo el finde para hacerlo.

Veo como todos se emparejan y yo por ir sola no se con quien ponerme. Veo que el chico de gafas de pasta también está solo. No parece mala idea ponerse con él. Me levanto y me dirijo a su mesa.

-Hola.-le digo sonriendo.

Él me mira y vuelve a recordarme a ese niño.

-¿Me dices a mí?-dice él tímido.

Yo río y asiento.

-Claro. Oye me preguntaba si quisieras ser mi pareja para el trabajo.-digo mirándole a los ojos. Tiene unos hermosos ojos color verde esperanza...

-¿Y...yo? ¿No te dará vergüenza hacer algo con el friki? ¿O que tus amigos se rían de ti por estar a mi lado?-dice él y aparta la mirada. Me entristece que piense eso.

-No, me da igual lo que la gente piense de mí. No estoy aquí para causar buena impresion, sino para conseguir un futuro. ¿Entonces te pones conmigo?-le insisto de nuevo.

-Está bien.-dice y sonríe tímido. Muestra unos hoyuelos que te enamoran. Tiene una preciosa sonrisa.

-Bien. ¿Te parece hoy en mi casa?-digo y él asiente.

-Vale toma la dirección. Nos vemos a las 5;30. Hasta luego.-digo y salgo de la clase para dirijirme al patio donde están mis amigos y mi novio.

-Hola chicos. Hola amor.-digo y le doy un beso donde él mete lengua.

-¡Eh tío pagaros un hotel e iros alli a meteros la lengua hasta la garganta!-se queja Carlos, uno de los mejores amigo de Álvaro.

Álvaro le saca el dedo corazón y yo me siento en el banco donde están mis amigas.

-Hola chicas.-digo sentándome al lado de Ana y Tamara.

-Hola guapa. ¿Vienes esta tarde de compras?-dice Tamara y yo niego con la cabeza.

-¿Por qué?-dice Ana.

-Tengo que hacer un trabajo y he quedado con mi compañero de clase.

-¿Está bueno?-dice Tamara y le doy en el brazo.

-¿Quién es?-dice Ana.

-Es ese chico de allí.-digo señalandolo.

-¿¡Marcel!?-dicen ambas y yo asiento. ¿Se llama así?

-¿Vas a hacer el trabajo con el más pringado del insti? Tía tu reputación se irá a la mierda.-dice Tamara y me encojo de hombros. Ellas empiezan a reírse de mí. Son así de malas, pero bueno.

-¡Eh tíos no os lo perdáis! _________ va ha hacer un trabajo con el pringado de Marcel.-dice Tamara y los chicos, incluido Álvaro se ríen.

-Nena, podrías haber cogido otro menos friki. Pero mira así no me pones celoso de ese tío. No tengo nada que perder.

-No pretendo ponerte celoso. Pretendo sacar el curso adelante. Y dejar de tratarlo mal, él no os ha hecho nada.

-Oh, vamos es un friki amariconado. Sólo le falta salir del armario. Sólo hay que verlo. Siempre sólo, empollón y marica. No es tu tipo.-dice Tamara y la fulmino con la mirada. ¿Por qué tienen que meterse con personas que no conocen?

-Es estúpido hablar con vosotros sin que insulteis a alguien.-digo cogiendo mis cosas y dirigiéndome adentro.

Alguien me coje del brazo y me detiene.

-Espera, ¿y mi beso?-dice Álvaro y le doy un piquito.-¡Oh vamos! Eso no es un beso.

-No todos son besos con lengua Álvaro. Además
estoy enfadada y da gracias de que te he dado un pico.

Me dirijo a mi clase y atiendo durante todas las horas.

Salgo del insti y me encuentro a este tal Marcel. Me mira y le sonrío, el aparta la mirada. ¿Por qué es tan tímido?

-Nena, ¿subes?-Me dice Álvaro desde su coche. Yo asiento y me lleva a casa.

-Oye antes de nada, el sábado hay una fiesta. ¿Vendrás no?-dice él y yo asiento.-bien nos vemos.-Dice y nos damos un largo beso.

Entró a mi casa y subo a mi habitación.

Llaman a la puerta y antes de que diga nada mi hermano entra.

-¿Cuantas veces tengo que decirte que hasta que no diga que pases no debes entrar?-le digo tirandole un cojín.

-Todas las que quieras, pero sabes que no lo voy ha hacer. Mamá quiere que bajes a comer.

Yo asiento y bajo detrás de él.

-¿Y papá?-pregunto cuando todos estamos sentados.

-En una reunión de trabajo. Hoy no come aquí ni cena por lo que me ha dicho.-dice mi madre.

Que raro. Últimamente mi padre no pasa nada de tiempo en casa. ¿Que le mantendrá tan ocupado?

Las cinco y media de la tarde y Marcel aún no viene. ¿Se habrá perdido?

Tocan al timbre y voy a abrir. Allí me encuentro al chico.

-Hola Marcel, pasa.-digo sonriendole. Él hace una mueca.

-Gracias, pero me llamo Harry.-dice él mirando al suelo.

Mierda.

-Oh, lo siento es que como todos...

-Me llaman así porque suena más friki que Harry. Supongo que tu por ser popular me llamaras Marcel.

-No, si tu nombre es Harry te llamaré así. No soy como los demás. Lo siento.

-No te preocupes, no lo sabías.-dice y me da una sonrisa.

-Bien vamos ha hacer el trabajo.-digo y nos dirijimos a mi habitación.

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