Capítulo 5: El atardecer en sus ojos

5.3K 568 345
                                    

8:50 p.m.

Al cabo de unos minutos decidí que era hora de salir de ese lugar, fui a los vestidores para poder vestirme y después volví por Luffy para también vestirlo.

Un hombre que había entrado se había quedado viendo mientras vestía a Luffy, por lo que intente vestirlo lo más rápido posible, asqueroso.

Cargue a Luffy en mi espalda sosteniéndolo de los muslos para que no se cayese, lo lleve hasta el dormitorio donde lo acosté en mi cama, pues subirlo sería mucho más complicado, me senté en la cama y pude ver sus cosas en el escritorio, entre ellas su consola.

9:20 p.m.

Fui al restaurante donde estarían los amigos de Luffy con Lami, al llegar vi que algunos estaban tomando y Lami hablaba con Nami y Robin.

La mayoría de ellos no paraban de tomar casi como si fuera una competencia y la comida simplemente seguía llegando.

Cuando finalmente todo término estaba casi por amanecer, se repartieron la cuenta, nos despedimos y lleve a Lami hacía su casa.

– ¡Mira Lami, lo domestique! – Cora-san sostenía una extraña cosa de colores que no había visto antes

– ¿¡Qué es eso!? – Lami lucía asustada

– ¡Es lo que cocine en la mañana, se llama Kenneth!

–Ok, yo... ya me voy

– ¡No, no me dejes aquí!... ¡Law!

– ¡Anda, tócalo, Kenneth es muy lindo, solo quiere ser tu amigo!

– ¡Law!

– ¡Lo siento, yo ya pase por esa fase, te toca!

Volví al edificio, los pasillos estaban oscuros y solitarios sorprendiéndome por lo silenciosos que eran, muy diferentes a cuando es de día.

Al llegar a mi cuarto pude ver a Luffy aún dormido, supongo que me toca dormir en la litera de arriba por esta vez.

20/08/17

8:50

Al despertar pude ver a Luffy algo desanimado en su escritorio, tenía su mentón recargado en sus brazos

– ¿Ocurre algo?

–Eh, no, solo que... había una promoción pero... no la pude aprovechar por dormirme

–Ah, sí, tus amigos me hablaron de eso y dijeron que era algo importante para ti... te ayude un poco

–¿E-enserio?

–Sí

Luffy tomo su consola y al abrirla sus ojos se iluminaron

–¡Gracias!... creí que nunca habías jugado

–No es como si los controles fueran muy complicados

–Gracias – Agradeció nuevamente con una tierna sonrisa – Por cierto... ¿Tú me trajiste?

–Sí

–Y... ¿me vestiste?

–Sí

–Ya veo... g-gracias – Su cara enrojeció

–No es nada... supongo

–... ¿Y qué planeas hacer hoy?

–Planeaba quedarme aquí estudiando

– ¿Y no irías conmigo a una feria? esta algo cerca

– ¿No tienes tarea?

–No importa, por favor... será divertido

Rompiendo las reglas (Lawlu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora