La gente cree saberlo todo

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Johanna POV:
Con cada día que pasaba, más me aburría. Me encuentro en el salón de clases observando a través de la ventana. En esta se puede apreciar como en el cielo se acumulan las distintas nubes de tono gris. Mentiría si dijera que se trata de una simple llovizna. Sólo espero que no llueva durante la salida de clases, adoro este tipo de clima, pero el hecho de que no tenga manera de volver no me garantiza puntos a favor.

-¿Johanna?-dijo una voz a mis espaldas

Al darme la vuelta encontré a un par de compañeras con sus miradas atentas a mi.

-¿Si?-

-¿No quieres venir? Estamos discutiendo sobre los vestidos, sería una vergüenza que se repitiera alguno-claro, me había olvidado

-Por supuesto-les dije sonriendo mientras me dirigía hacia ellas. La verdad es que prefiero seguir viendo la ventana, es más divertido. Pero ellas no tienen porque saber eso

-No entiendo para que te molestas en invitarla, si no tiene acompañante-dijo Katy. Yo sólo la mire enojada

-Oye no digas esas cosas Katy, no es lindo-dijo Clara, la pelirroja de aquel grupo

-Por favor, todo el mundo sabe que Erik me eligió a mi por encima de ella. Es obvio que no va a conseguir a nadie más-y tiene lógica, si yo le abriera las piernas a cualquiera también me elegirían por encima de las demas

-¡Katy! No mientas, si Johanna es una chica hermosa, puede conseguir al chico que quiera-me defendió Clara ganándose así el odio temporal de su amiga

Luego de eso ninguna de las dos habló. Tampoco se pierden de mucho. El baile de graduación es unos de los temas más populares por todo el país, o mejor dicho del mundo. Las chicas esperando con ansias la invitación de su amado. La compra del vestido y los zapatos. Los nerviosismos de saber si a tu pareja le gustará tu vestimenta. La coronación.
Esta demasiado comercializado aunque no puedo negar que me gustaría ir. Katy tiene razón, no tengo ninguna pareja y no es que eso me vaya a impedir la diversión pero si te convierte en el chisme del momento. Y eso es algo que siempre pretendo evitar...

~Horas después~

Maldita lluvia, apareces cuando menos te necesito. Creo que hubiese sido mejor ir con ellas, o no...

*Flashback*
El timbre había sonado indicándonos que éramos libres. Tomé mis cosas rápido y salí en busca de Jess que se había adelantado. Aun tenía esperanzas de que pudiera alcanzarme hasta mi casa.

-¡¡JESS!!-grité lo suficientemente fuerte para que todos los presentes voltearan a ver

-¿Qué pasa?-dijo ella mirándome preocupada

-¿Puedes alcanzarme?-

-ohh, iremos con las chicas a probarnos vestidos. No puedo alcanzarte a tu casa pero puedes venir, sería grandioso-no,no,no y no

-No te preocupes ya veré como irme... me encantaría estar con ustedes pero tengo que... ¡alimentar al gato! El pobre no comió en la mañana-dije tratando de sonar convincente. Ella sólo se rió

-Jo, no tienes un gato-claro, pequeño detalle

-Ehh si tengo, es nuevo-

-Claro, como digas. Mándale mis saludos al gato-dijo abrazandome para luego susurrarme al oido-la próxima no te salvas, vas a ir a ese baile aunque tenga que arrastrarte
*Fin Flashback*

No, definitivamente no hubiera sido mejor. ¿Cuantas cuadras faltan? No recuerdo que mi casa quedara tan lejos.
Un auto frenó de repente impidiendome el paso. Genial, lo que me faltaba, ser secuestrada.

-Creo que necesitas que te lleven-dijo la persona dentro del auto abriendo la puerta

-Creo que te equivocas Forest, estoy bien. No necesito tu ayuda-

-Vamos, deja tu orgullo y sube. Al menos que lo que busques es enfermarte-

-Ugh, de acuerdo-

No quería admitirlo pero estoy agradecida de que el auto tuviera calefacción. Me estaba congelando ahí afuera.
A pesar de haber sentado atrás Michael pudo notar mi estado y automáticamente se quitó el abrigo que tenía quedándose sólo con su remera.

-Ten-dijo pasandome el gran buzo-a kilómetros se nota que tienes frío

-Gracias-nuestras miradas se observaban sin temor alguno. Por alguna razón me sentía bien, más que bien

El al percatarse de la situación alejó su brazo y empezó a conducir.

-¿Cuál es tu dirección?-dijo serio

Michael POV:

Deje a Johanna en su casa y me fui lo más rápido que pude de ahí. Previamente tuve un momento de debilidad. Al darle el abrigo nos miramos y me perdí una vez más en sus ojos, pero al darme cuenta me alejé, no podía dejar que eso volviera a suceder. Tengo que recordarme que ella no tiene interés alguno en llevarse bien conmigo...

Me encuento observando mi cuerpo en el reflejo. Empiezo por mis pies, los cuales tienen moretones como la mayor parte de mi cuerpo, hasta mi cabeza. Los ataques habían dejado de ser frecuentes pero se volvieron violentos. Hay veces en las que aparecen mientras duermo, una especie de epilepsia se hace presente sin que me entere. Amanda se la pasa atenta a todo esto, pero no tiene la fuerza necesaria para ayudarme y por ende termino lastimado.
Mis manos trazan una y otra vez aquellas marcas que atraen tantos recuerdos. Verticales, horizontales, profundas, superficiales. Cada una es diferentes a las demas. No estoy orgulloso de haberlo hecho pero es parte de mi pasado y no puedo escapar de el. Cada cicatriz es uno de mis demonios y debo aprender a vivir con ellos. A pesar de que ya superé esa etapa y de que aprendí a tener autocontrol no puedo evitar, en mis peores dias, querer ceder ante la tentación de volver a sentir aquello sobre mi piel. Pero no voy a conseguir nada con eso. Todo el dolor que pasé y aun paso se acumula en mi interior y si, en algún momento va a salir, pero no mientras pueda evitarlo.
Mi hermana solía conseguirme ayuda para mi depresión y por esa razón preferí ser como soy. Tantos hombres y mujeres con un papel que los convertía en especialistas. Recepciones y salas llena de objetos. Luces tenues y paredes blancas. Esos fueron mis recuerdos por un largo tiempo. Todos me hablaban como si fueran yo, como si entendieran lo que me pasaba. La gente cree saberlo todo cuando en realidad no es así. Estaban muy equivocados a pesar de sus prestigiosos documentos. Expresando ideas tan ignorantes a pesar de la elegancia de sus palabras. Hay cosas que por mas que intentemos no vamos a poder comprender. Existen momentos en los que no se deben intervenir. Hay personas que no pueden ser salvadas, y yo soy una de ellas...

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Hola! Aquí les dejo otro capítulo. Perdón por la tardanza, la verdad es que no tuve la oportunidad de escribir por mucho tiempo, mi idea es poder subir otro capítulo más tarde. Espero que lo disfruten.
Besos♡

Cruzando La RealidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora