Bienvenida

483 42 25
                                    

Cuando menos lo pensé ya había sido empujada al interior del auto.

Intenté ocultar o controlar la frustración que me carcomía,sentía que era tan pequeña y desprotegida.

El hombre de seguridad cerró la puerta,el no me podía ver por los vidrios polarizados pero yo si,y ví como guiñaba un ojo.

Jamás en toda mi vida había necesitado de alguien para que me protegiera y esta no era la excepción.

El chico desconocido me miraba curioso.

Cerré los ojos para encontrarme con

sus dos esferas verdes esmeralda.

-Hola,soy Harry Styles-Saludó sonriente.

-_____ Jackman-Contesté a regañadientes.

Su grande mano se coló en una esquina de mi vista.

Tomé su mano,nuestras pieles tocandose.

Un escalofrio recorrió mi espalda,un

choque eléctrico quizás.

Rompí el tacto bruscamente.

-Es un gusto conocerte al fin-Me dijo

pareciendo no haber notado mi gesto.

-¿A dónde me llevarás?-Pregunté.

-Insisto,el gusto es todo mio-Bromeó

con una sonrisa.

-Guarda tus tontos e innecesarios comentarios-Gruñí.

-Estoy encargado de tu seguridad hasta que estes a salvo con tu padre-Respondió.

-No fue lo que pregunté-Recalqué.

-No lo sé.Estoy esperando ordenes-Agitó un Walkie-Talkie.

Movía mi pie de un lado a otro,taradeaba mis dedos en la ventana empañada y cantaba una vieja canción.

¿Por qué a mi? ¿Por qué de todos los chicos del mundo me tocó un retardado para protegerme?

Ni siquiera hablaba,se perdía en sus pensamientos con la mirada clavada al frente.

De acuerdo,no niego que era muy sexy el desgraciado pero eso no tenía relación con lo bruto que era.

-Bienvenida a Londres-Dijo de pronto.

¿Era una broma? ¿Ahora me hablaba? Bueno,su cara no demostraba pizca de sarcasmo o diversión.

¡Qué raro era este chico!

-Gracias-Mi voz sonó aguda.

¿Qué demonios me sucedía?

Intentaba controlarme,me enfurecía

el simple hecho de ponerme nerviosa con un chico.

¡Dios,solo era un niño mimado!

Sí,eso era para mi.Un hijo de algún socio de mi padre que es muy consentido.

-¿Eres asmática?-Preguntó dudando entre hablar o callarse.

-¿Qué? ¿De qué hablas?-Profundicé el ceño.

-Estas respirando muy extraño...pensé que quizás tenías un ataque de asma-Balbuceó nervioso por mi mirada de poseida.

Me gustaba atemorizar a las personas,sentir que te obedecerán tan solo por temor de como reaccionarás o que les harás si se atreven a contradecirte.

Pero una vocecilla en mi mente,me prohibió que no fuese asi con el,que debía hacer las cosas diferentes ahora.

-No,no soy asmatica-Respondí teniendo las palabrotas quemando mi garganta.

Hasta que la mafia nos separe (Harry & tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora