OBLIVIATE (Draco Malfoy )

Capítulo 32 : Empezando por el final

Hola, personas que me llevan acompañando durante todo mi viaje. Como ya sabréis, soy _____ White y siento tener que deciros que hoy finaliza este extraño libro.
Siento que os mentí, perdonadme. Si mal no recuerdo, la primera frase que dije fue : Hola, me llamo _____ White y me levanto cada mañana pensando en la mierda que es mi vida.
Era una terrible ingenua cuando decidí escribir eso, una gran y estúpida ingenua.
En mi defensa diré, que en aquel entonces yo aún era bastante inmadura y no sabía qué me podía deparar el futuro, no sabía lo que era realmente una mierda de vida.
Así que os pido perdón si al principio me comporté como una estúpida infeliz que se lamentaba por no tener amigos, lo siento.
Pero si a pesar de eso seguisteis leyendo mi historia, supongo que tan mal no os habré caído, pero aún así pido disculpas a todo aquel que me haya tenido que aguantar. Sin dulda alguna si pudiese pulsar un botón para volver atrás en el tiempo y reescribir lo que hice y como me comporté, lo haría. Pero por desgracias de esta vida, ese botón del tiempo aún no está inventado.
También pido disculpas por que en breve averiguaréis como acaba esta novela y el porqué de su título.
Lo siento por todo, de verdad que lo siento.
Atentamente,
_____ White
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Desperté por que sentía una respiración sobre mi cuello, que me ponía los pelos de punta. Y al encontrarme en la Torre de la Astronomía con Draco a mi lado y ambos abrazados, al principio no supe qué había sucedido. Pero después miré el reloj de arena que colgaba de mi cuello y recordé lo sucedido hacía ya varias horas. Y como podéis imaginar empecé a sonreír como una loca.
-White, deja de sonreír de esa forma. Te saldrán arrugas. (Dijo la voz de un recién levantado Draco Malfoy)
-Tu siempre tan amable y cariñoso Draco. (Dije riéndome aún más, parecía una desquiciada)
-Oye, será mejor que volvamos cada uno a nuestra sala común, o la gente nos echará en falta cuando se despierten.
-Tienes razón. (Dije dando un bostezo)
-Qué, ¿estás cansada? (Dijo Draco con una sonrisa)
-Es que dormir el suelo de esta Torre no es algo precisamente cómodo, que digamos.
-¿Seguro que es por eso? No es por lo que sucedió ayer cuando... (No le dejé acabar por que sabría que si tocaba ese tema me pondría roja cual tomate)
-¡Draco Lucius Malfoy Black ni se te ocurra bromear con eso!
-Jamás bromearía con algo así, menos contigo. (Dijo mirándome dulcemente)
Me acerqué a él y le di un tímido beso.
-Nos vemos más tarde ¿no? (Pregunté)
-Claro, nos vemos luego. (Dijo aparentemente feliz, pero juraría haber visto como le temblaba la voz, y el miedo cruzaba por sus ojos)

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Tras cambiarme de uniforme y bajar a Gran Comedor, me senté en la mesa de Ravenclaw y empecé a charlar con mis amigos.
-______ ,  ¿dónde te habías metido? Juraría que no apareciste en toda la noche. (Dijo Luna)
-Que va Luna, estuve... Hablando con Dumbledore hasta que fue muy tarde, y esta mañana salí bastante pronto a dar un paseo. (Dije inventando sobre la marcha)
-Que raro, me he levando hoy dos horas antes de lo normal por que he dormido faltal y no te he visto _____ . (Dijo Cho uniéndose a la conversación)
-Me levanté tres horas antes. (Dije rápidamente)
-Mmmm... Para dar un paseo con Malfoy ¿o no White? Un paseo que duró desde por la noche hasta esta mañana. ¿O acaso me equivoco? (Cuestionó Terry)
-Joder... Bueno, yo... Esto.... Nosotros.... Hablamos. Es decir, me felicitó por mi cumpleaños y luego si que es verdad que volví a la habitación. (Dije como una verdad a medias)
-Haré con que te creo, pero es que da la casualidad de que te vi subir hasta la Torre de la Astronomía a toda prisa con tu novio/no novio y me dio por seguiros. Y lo cierto es que al llegar escuché unos ruidos bastante raros que... (A él tampoco le dejé terminar)
-Terry Bott cierra tu piquito de Oro en este precioso instante! (Casi chillé) Yo no le cuento a media mesa de Ravenclaw lo que hacéis tú y Cho.
-No, pero por lo menos podrías haberme contado que ya no eres... (Nuevamente le tapé la boca con ambas manos)
-¡Callate antes de que prube contigo la maldición Cruciatus!
-Está bien, agresiva...
Después de aquello todos espezamos a reír, exceptuándome. Ya que aparte de que me acababa de percatar de que Draco no había aparecido en todo el desayuno, me acababa de llegar una nota de Dumbledore que decía así :