Capítulo 33 : OBLIVIATE

710 42 8
                                    

Finalmente obedecí como buena alumna a la última voluntad de Dumbledore, y permanecí a salvo, escondida, huyendo del peligro. La gran metáfora de mi vida.

Desde allí vi como segundos después de mi partida, Bellatrix, la bondadosa tía de Draco, entró junto a otros dos mortífagos en la Torre y se dispuso a persuadir a su sobrino para que acabase con la vida de nuestro querido director. Aún hoy, sigo teniendo pesadillas con su estridente voz, y con las cosas que dijo aquella noche en la Torre.

Finalmente, Snape entró y acabó con la vida del pobre Dumbledore. Un tiempo después comprendí que siempre lo tuvieron planeado, que Dumbledore sabía que moriría aquella noche, pero no a manos de un inocente. El pobre Albus quiso salvar la triste alma de Draco.

Juro que cuando fui testigo de cómo Dumbledore caía de la Torre, algo se partió dentro de mí. Es cierto, nadie aparte de Snape ensució su manos aquella noche, pero aún a día de hoy, siento como si una bruma espesa se hubiese instalado en mi pecho desde ese día...

--------o--------

Minutos después de la muerte de Dumbledore, los mortífagos comenzaron a salir rápidamente de la Torre, como si hubieran sido impulsado por alguna fuerza maligna.

Justo entonces caí de rodillas y el hechizo que mantenía a Harry petrificado se deshizo.
-_____ tú... ¿Sabías todo esto?
-No. (Dije a media voz)
-Voy a matarlo, juro que voy a matarlo... Y tú... _____ , Merlín... No sé como pudiste amar a semejante sabandija...

Entonces Harry corrió detrás de los mortífagos, y yo me quedé allí... Delirando, sin saber qué hacer.

No sé exactamente cuánto tiempo pasé allí, sintiéndome abandonada y sobre todo, muy sola.

No reaccioné hasta que el reloj de la escuela dio las once en punto. Y recordé, que a pesar de todo lo que había sucedido. Aún tenía una cita a esa hora.

Crucé los pasillos de Hogwarts sintiéndome como una extraña, procuré evitar los pasillos desolados por el ataque, y sobre todo huí de la compañía de otros magos.

Eran exactamente las once y cinco minutos cuando llegué a la linde del Bosque Prohibido, y ahí estaba él, como un espectro de sombras y luces. Su pelo rubio como el oro, destacaba entre toda la negrura del siniestro bosque, y a pesar de su mueca torcida y de que aquella noche ambos sabíamos que algo estaba comenzando a romperse entre nosotros, sentí como si acabáramos de conocernos. Me transporté mentalmente a aquel conmorable momento en el tren cuando le conocí, y sonreí por que aunque no supiera con exactitud para qué me había citado allí aquella noche, podía imaginarlo. Y para mi desgracia, mi buena intuición no falló aquella vez.

-Como siempre desafiando a la suerte White... No podía quedarte en mi habitación por unas horas...

-Tampoco es como si hubiese hecho una gran azaña saliendo, no he corrido peligro Draco. Y tú... No has aceptado unirte a la Orden...

-No hubiera podido ni aunque quisiese, el Señor Oscuro me habría seguido hasta los confines del universo sólo para cobrarse venganza. Y lo sabes. De todas formas, no quiero discutir contigo esta noche. Necesito decirte algo importante, y debo darme prisa, Bellatrix no tardará en regresar a por mi...

-Lo sé.

-Dame la mano, por favor.

Y como tantas otras veces, hice lo que me pedía, por que en aquel tiempo le hubiera seguido a cualquier parte, hubiera hecho cualquier cosa por él. Por que le amaba, y confiaba en él plenamente...

--------o--------

Draco tomó mi mano y en unos segundos nos transportó a un hermoso puente, tenía detalles de un color azul precioso, y a la luz de la luna era como de ensueño. Tardé unos segundos en comprender dónde nos encontrábamos.

-Este puente se llama "Tower Bridge", pasamos cerca de por aquí cuando vinimos a visitar a tus primas. Pero no nos dio tiempo para venir a verlo. Supongo que era una de las tantas cuentas pendientes que tenía contigo _____ , así que creo que es mejor lugar para decirte lo que tengo atascado en la garganta desde hace tanto tiempo.

-Draco... Creo que sé que es lo que te inquieta... Yo... (Y aunque me hubiese gustado detenerlo, besarle, hacerle entrar en razones, algo dentro de mí me susurró que debía dejarle hablar, por lo menos aquella última vez). Habla, por favor.

-A partir de esta noche, nada volverá a ser lo mismo en el mundo de los magos, tampoco en el muggle. La guerra como tal está a punto de estallar y supongo que mi bando en ella estaba decidido incluso antes de que naciera. ______ , quiero que sepas que voy a luchar, no en el bando correcto, pero voy a hacerlo, tengo que hacerlo, por ti. Por que de no haber sido por ti probablemente hubiera abandonado mi lucha hace mucho tiempo.

Sé que jamás te quedaría encerrada en tu casa, a salvo del peligro. Y yo no soy quien para obligarte a que contengas tus impulsos de heroína tan característicos de Potter...(Hasta en aquellos momentos, Draco conseguía hacerme reír). Lucha ______ , lucha junto a los tuyos, derrotar a Lord Voldemort , hacer de este mundo un lugar mejor... _____ , te estoy pidiendo que seas feliz, por que es el último regalo que puedo darte, la garantía de que seas feliz. Y ambos sabemos que con mi recuerdo nunca lo serías. Te libero de todas tus promesas, sé feliz ____ , enamórate de nuevo, encuentra tu meta en a vida, y vívela a tu manera, que nadie te diga nunca lo que hacer. ______ , te amo, con todo mi corazón, con cada milímetro de mi alma. Y por que te amo, tengo que dejarte ir.

-Vas a... Es decir.... ¿Quieres borrarme la memoria?

-No exactamente mi vida, voy a borrarme a mí de tu memoria. Por que sé que de lo contrario volveríamos a encontrarnos ______ , y mi destino ya está escrito, siempre lo estuvo. Pero tú aún puedes cambiar el tuyo.

-¿Esto se ha acabado Draco? ¿Quieres bórralo todo, sin más? ¿Después de todo por lo que hemos pasado? ¡Yo también te amo, tengo derecho a amarte, no puedes elegir por mí!

-Perdóname _____ , pero quiero que seas feliz, es lo último que pido...

Para entonces ambos estábamos rotos, ebrios de amor. De no ser por la oscuridad de la noche ,habríamos parecido un par de locos que lo mejor que tenían que hacer era gritarse el uno al otro sobre el Tower Bridge.

-Draco, no me dejes...

-Lo siento.

Entonces el gritó, un hechizo que pasaría a ser lo único que escuchase en sueños durante los años siguientes. Un hechizo que acabó por romper el frágil hilo invisible del destino que aún nos unía. Y le odié. Aún le odio por ello.

-¡OBLIVIATE!

Después de eso sentí como todo empezaba a dar vueltas, y los ojos se me cerraban por momentos.

Lo último que aquí voy a contar, no sé si fue obra de mi macabra imaginación, o sin tan sólo todo se trató de un sueño, pero juro que mientras el veneno del sueño inundaba mis venas, creí escuchar una voz, en aquellos momentos desconocida para mí :

-No quiero irme mi vida, pero tampoco puedo quedarme. Si alguna vez consigues dispersar la arena lo entenderás... Entenderás lo que hice por ti, y espero que para entonces, hayas podido perdonarme... Te amo.

Con mucha paciencia, varios años más tarde comprendí lo equivocada que estaba aquella voz.

FIN

OBLIVIATE (Draco Malfoy )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora