Guardiana ♧[[♡EDITANDO♡]]♧

Fantasma sin historia- Cap 10

La niebla se iba desvaneciendo, dejando ver a Everlyn sentada en el suelo y a el guardia desapareciendo entre las llamas que les lanzó Lyn. El otro guardia ya no estaba, todo el mundo miró a Felix en busca de respuestas.

-A mi no me miréis.-Dijo levantando las manos-Se lo ha cargado Evelyn.-La señaló, ella seguía en el suelo. Abby bajó del árbol y abrió la alcantarilla. Uno tras otro fueron bajando, saltando, y siguieron el pasillo de la derecha, hacia una luz azul. Iban por mitad de camino cuando escucharon un grito, se intercambiaron miradas de preocupación; pero el grito se volvió a pronunciar. Era, sin duda, Carter; Gritaba desesperadamente. Salieron corriendo hacia la dirección del grito, al llegar vieron a Carter tumbado en una camilla, atado de brazos y piernas; Abby se dirigió a él velozmente. Y cuando lo abrazó, volvió a gritar.

Se escucharon pasos a sus espaldas. Era Percy, pero a nadie le importaba él en ese momento, todo el mundo estaba concentrado en su amigo, quien gritaba de dolor.

-No se preocupen-Empezó a hablar el semidiós.-Solamente esta profundamente sumergido en una pesadilla canival.-Las caras de pánico eran poco disimulables.

-¡Eso puede llegar a matarle!-Exclamó su padre, la pesadilla canival consistía en: quedarte sumergido en un mal sueño, donde eres real. Es decir, que si te llegan a matar en ese sueño, mueres en la vida real. Suele ser en una de tus peores pesadillas.

-Eso ya lo se-Dijo Percy, quitandole importancia.-¿Por que tan preocupados?

-Porque es mi hijo.

-El mató a los míos.-Abby se acercó por detrás.

-¿Ona y Coral?-Preguntó la guardiana. Este afirmó.-Pero si son tus hijos, también son semidioses, y los semidioses no pueden morir, por el hilo de oro...-Dijo negando la cabeza.

-Yo soy un semidiós, y ellos son mortales.-Habló Percy. Abby estaba ganando tiempo para que, Lyn y Felix, desataran a Carter.-Y ahora él pagará por sus deudas.

-¿Pero no tienes más hijos?-Dijo Ronald.

-Si, pero...

-Pero nada, a vosotros. Los semidioses, no os importan vuestros hijos, si no vuestro heredero. ¡Y tu tienes cuatro más!-Estaba eufórico.-¡Nosotros!¡Los humanos, los amamos!Para nosotros no son objetos...-Desconsolado miro a su hijo, un gran error. Ya que él Semidiós que estaba presente, giro para ver él problema.
Cárter estaba apoyado en una pared, intentado mantenerse en pie.

-Ellos no están muertos...-Dijo Cárter, con un hilo de voz.-Ellos no pueden morir... Por que tomaron el Carloz mágico.-Fue avanzando hacia ellos, torpe y lentamente.

-¿El Carloz mágico?La bebida de la eternidad...¿Pero como?-Hablo Percy, totalmente aludido.

-Ellos están protegiendo a sus elegidos...-Dijo el Guardián, antes de caer al suelo.-No hacía falta vengarlos.-Finalizó.
Después de explicar todo, la visión de Cárter se volvió totalmente negra. No oía nada, no veía nada, no sentía nada, por una sola razón. Cárter había dejado de respirar.
Abby se acerco a él. Lo cogió por él cuello y lo abrazó fuertemente, "Despierta" decía entre sollozos,"Vamos despierta", varias lágrimas bajaban por sus mejillas."Cárter no estoy de bromas" repetía una y otra vez"Vamos, despierta...". Ello no quería aceptarlo. No podía acerptarlo. Todos estaban presenciando la escena a cámara lenta.

Negro.
Dolor.
Lloros.
Tristezas.
Venganzas.
Tonterías por las que esto a pasado.

Todo él mundo se concentraba en el frío cuerpo de Carter. Pero nadie se fijaba en su fantasma.
Así es, Cárter se había convertido en un espíritu. Él los oía, pero ellos a él no.

-Abby...-Dijo él, sin recibir respuestas.-Abby debes oírme.-La sujetó de los hombros.-¡Se que puedes oírme!.-Gritó con todas sus fuerzas. La Guardiana pudo escucharle, pero pensó que se estaba volviendo loca.

-¿Carter?-Dijo la Guardiana, haciendo que todos los presentes la miraran.-Le he oído.-Se levanto de golpe. Giro donde estaba Cárter.-Cárter...-Caminó, pero lo traspasó. Podía oírle pero no verle.

-Abby por favor...-El fantasma la abrazó.-Estoy justamente aquí.

-No te veo...-Dijo respondiendo.

-Porque ya no estoy vivo.-Las lágrimas de la Guardiana aumentaron.-Ahora mismo soy un fantasma sin historia...-Respondió-Por que mi historia eres tu, y ya no te tengo...-Se separó de ella.-Por que no podre descansar en paz si no te digo mis sentimientos-Abby empezaba a verlo. Veía su piel pálida. Levantó su mano y pudo tocar su cara.-Te amo, y siempre lo he hecho...-Poco a poco se desvanecía en la nada.-Adiós...-Cárter desapareció y la Guardiana se dejó caer en al suelo, con una mano en el pecho.

-Se ha ido...-Comento, antes de romper a llorar.

Los días progresaron grises y tristes. Abby no salía de su cama, Evelyn intentaba animarla, Ronald cayó enfermo y Tara permanecía con Félix.

La felicidad se había ido.

Llego el día del entierro, todo él mundo tenía la ropa negra y con pañuelos en mano.
Todo el mundo permanecía en silencio observando él atauz abierto, con él cadáver del difunto.
Pero las miradas se desviaron a la puerta, la cual se abrió dejando ver a la familia O'Conell.

Todos dejaron un camino libre para que Abby pudiera pasar. Se arrodillo ante Cárter.
Solamente en pensarle le dolía, pero verlo allí tan pálido y tan serio, le arrugaba el corazón.

-Me dijistes que nunca me dejarías sola.-Acarició su cara.-Eres un tramposo, siempre librandote de los problemas.-Una lágrima se deslizo por su cara.-Nunca pensé que fueras a dejarme. Siempre fuiste mi incordio favorito.-Se levantó.

-Y tu siempre fuiste mi problema favorito.-Dijo la voz, su voz. La voz de Cárter.

La vida sigue. Pero su recuerdo sera difícil de olvidar. Y más para la persona que creía no amarlo, pero en realidad si lo hacía, desde el momento en que vio su sonrisa.