Nuevamente salí corriendo de mi casa, realmente iba atrasada ¡las chicas iban a matarme!
Me llamo Sara Arrow. Tengo 18 años, altura promedio, cabello castaño oscuro levemente ondulado y tez morena clara.
¡Aun no comprendo como el tiempo se pasa tan rápido! Debo arreglar este horrible defecto mío.
Hoy es el ultimo día de vacaciones de invierno, por eso me juntaré con Sonia y Lucy, las extraño muchísimo. Asistimos a distintas Universidades y Academias, por lo que no nos vemos con frecuencia y es algo triste, ya que hemos sido amigas prácticamente toda la vida.
Volviendo a mi maratón de impuntualidad…. Mamá abolló la puerta de mi auto mientras se estacionaba, y por eso he sido pasajera de buses y metros últimamente.
Al fin llegué y las divisé de inmediato.
-¡Hola chicas! ¡Lo siento! –jadié.
-Qué raro tu tan tarde…-dijo sarcásticamente Sonia.
-Enserio lo lamento, saben que no soy buena en esto y aun peor si mi auto no está disponible.
-Vamos a llegar tarde si seguimos conversando ¡vamos! –nos apresuró Lucy.
Caminamos hasta llegar a Wolf, nos encanta ir allí, ya que siempre hay bandas en vivo. Es mi lugar favorito.
Estaba algo nerviosa, esta vez iríamos con los compañeros de la academia de Sonia y unos compañeros de Lucy, claramente no conocía a nadie más que a ellas.
Al llegar a la mesa donde nos esperaban me di cuenta que la mayoría eran chicos y que eran muy guapos.
Pedí mi típico Blue Lagoon Vodka, encendí un cigarro y me uní a la conversación.
Mientras traían nuestro pedido, un chico se sentó a mi lado. No pude evitar mirarlo de reojo y darme cuenta que era guapísimo.
Fingí no haberme percatado de su presencia y seguí conversando con Lucy y una compañera de ella.
De pronto sentí que alguien tocaba mi hombro.
-Hola, ¿Me prestarías tu encendedor? –dijo el chico guapo anónimo.
-Claro –pasándole mi encendedor.
-Gracias ¿Podría saber tu nombre? –dijo vacilante encendiendo su cigarro-. Hace un rato no pude escucharlo. Por cierto, mi nombre es Robert.
-Sara –le dije sin prestarle demasiada atención.
Inmediatamente percibí en su expresión la sorpresa por mi poco interés en él.
Sentí mi teléfono sonar.
-Permiso –dije en voz baja. Me alejé sin mirarlo directamente, pero de reojo divisé como asentía con una expresión de decepción.
Salí de Wolf para poder escuchar la llamada, estaba por salir la banda de esa noche.
-Hola ¿Quién es? –era un número desconocido.
-¿Acaso ya no recuerdas la voz del mejor de los mejores?
-¡Ian! Jamás olvidaría una voz tan molesta –dije riéndome-. Te extrañaba idiota ¿cambiaste de número?
-¡Ah, sí! Acabo de llegar. Hubo un montón de problemas tontos y nos demoramos el doble –ya lo veía echar humo-. ¡Maldita mudanza!
-¡Tú eres el maldito! Estás en mi país favorito, recuerda conocerlo a fondo, porque serás mi guía cuando viaje algún día.
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Arrow
Novela Juvenil‘‘Una flecha solo puede ser disparada tirando de ella hacia atrás. Cuando la vida te empuje hacia problemas y dificultades, significa que te va a lanzar lejos hacia algo increíble ¡Así que concéntrate y continúa apuntando!" Sara tenía su vida pl...
