Y estoy aquí, en la estación internacional de la OMPU dando vueltas en un espacio eterno desde hace diez a años.Diez años que según me contaron cuando desperté estuvieron marcados por guerras y conflictos entre naciones,por hambre, necesidad y miedo.
Cuando por algún extraño motivo la Tierra comenzó a alejarse del Sol las plantas murieron al igual que la mayoría de los animales y la raza humana se redujo a unas pocas personas alojadas en escasa cúpulas geodésicas repartidas por todo el globo.Miles de familias siguen sobreviviendo en la Tierra a duras penas, entre ellas la mía.Hace diez años y tres meses que no veo a mi mujer ni a mis hijos.Mi nombres es George Gidgeon , y fue el primer hombre en inventar un viaje a Plutón con una nave únicamente propulsada por velas solares, el experimento era obviamente un suicido ya que era secreto y no estaba financiado por el estado.La compañía si se podía llamar así , para la que trabajaba consistía en un grupo de aficionados universitarios que dejaban con toas sus fuerzas llegar al espacio.Y tan entusiasmada estaba la comunidad que casi no se dieron cuenta de que la Tierra se movía,muy lentamente pero se movía y cuando se quisieron dar cuenta fue demasiado tarde para remediarlo,así siguieron las disputas y las guerras; llevando a la humanidad a su propio conflicto.
Después del experimento, mi pequeña empresa se elevó hasta convertirse en la mayor del momento, mi departamento se encontraba en una cúpula geodésica que personalmente había diseñada.Se erguía en el extrarradio de Nueva York.La llamábamos el Ades; en ella albergaba poco más de quinientas personas, era una mini ciudad pero eso era suficiente para mantenernos calientes gracias a unas tuberías subterráneas conectadas a una central que extraía calor desde el núcleo terrestre.La comida y las provisiones nos llegaban cada mes y los trabajos eran variados ya que había mucho que mantener.Mi casa estaba situada al lado de las oficinas ya que era el director de la Cúpula, en ella vivía mi familia: mi mujer Eliza, mi hija Sarah de trece años, y mi hijo Dennie de diecisiete.Juntos vivíamos felices al margen de las guerras políticas; o al menos eso creíamos. una noche durante una monstruosa tormenta de nieve, una bomba estalló en la boca de la entrada principal del Ades ,abriendo una brecha que destruyo la ciudada de, acabando así con la vida de muchas personas, nadie supo nunca quien puso la bomba porque inmediatamente la gente corrió a salvarse metiendo se en las cápsulas propulsoras de cañón que había en las oficinas generales ,estas servían para expulsar a las personas en caso de emergencia a la velocidad de la luz hacia la estación de la Organización Mundial de Países Unidos o también llamada OMPU.El viaje era muy arriesgado y existían muchas probabilidades de explotar en el espacio.
como director me arrastraron hasta una cápsula sin darme opción alguna y muy a mi pesar, esta salió despedida automáticamente dejándome el oscuro y frío sentimiento de duda sin saber qué es lo que le habría ocurrido a mí familia y abandonando a todas las personas que había en el Ades.
Llegué a la nave exhausto e inconsciente, con quemaduras graves por congelación y falta de oxígeno pero lo que más darlo me hizo fue saber que jamás volvería a ver a mi mujer y a mis hijos.ya han pasado diez largos años y, aque solo haya vivido cincuenta y tres me siento mucho mayor.
El sonido de unos pasos que resuenan en el pasillo me saca de mis pensamientos. se detienen en mi puerta, esta se desliza suave,ente a un lado, dejándome ver a los dos hombres que hay en el umbral. Uno es de mí misma edad, con aspecto desgarbado , sucio y cansado. Tiene el pelo cano y sonríe tristemente; el otro es es un joven de 27 año al que reconozco a duras penas ,a pesar de ser su padre . Dennie Gidggeon y Mark Tull están apoyados en el marco de la puerta. Mi hijo se acerca , y me susurra al oído :
-Las hemos encontrado, a mama y a Sarah, han organizado una expedición hasta la Tierra con naves crucero de vela, las podremos rescatar.
Me acaricia suavemente la frente y en ese momento algo se suelta dentro de mí, algo que llevaba mucho tiempo conteniendo; el sentimiento de culpa. De repente, estoy más cansado que nunca, cierro los ojos pensando en todas las cosas que he hecho bien, convenciéndome de que muchas personas han podido huir a otros planetas con el modelo de velas que inventé, que han podido salvarse y vivir mejor vida. Entonces es cuando me doy cuenta de que no todo esta perdido y que merece la pena luchar. Pero esta ya no es mi guerra , y he hecho todo lo que estaba en mi mano, y lo único que deseaba con todas mis fuerzas se ha cumplido. Así que, levantó la cabeza hacia mi hijo Dennie, todavía con su mano en mi frente, y le miro a los ojos por última vez. Después dejó de luchar. Aceptando así que la oscuridad me trague por completo. Y, aunque oiga voces de alarma a lo lejos que poco a poco se convierten en susurros, estoy calmado en mi interior.
Habré causado mal y provocado guerras , también haber abandonado a mis seres queridos cuando mad ,lo necesitaban. Pero al menos dejaré este mundo sabiendo que no todo está perdido.
No le tengo miedo a la muerte y sobretodo sabiendo que he cumplido mi misión y he encontrado el perdón.
Por mi:)
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Operación A.D.E.S
Fiksi IlmiahPrimero la Tierra comenzó a alejarse del Sol, luego murieron todas las plantas y por consecuencia, los animales. Solo quedan los humanos ¿Quién sobrevivirá?