La vida de Abigail en el patinaje artistico de competicion❤️

Capitulo 2: La noche antes

Abigail miraba en todas direcciones, sin saber muy bien donde posicionar sus ojos. A todos lados veia a familias y amigos abrazandose y interesandose en como les habia ido el viaje. A decir verdad, Abigail empezaba a tener miedo al estar alli plantada esperandose a que su tia apareciera de la nada, ya que tampoco la habia visto casi nunca.

La tia en la cual tenia que pasar la noche en su casa era una hermana pequeña de su padre, con la cual la familia habia perdido el contacto desde hacia un monton de tiempo, pero era la unica persona que conocian que estuviese por Barcelona y que pudiera ayudar de alguna manera u otra a Abigail. -Si es la hermana pequeña de mi padre, en algo se debe parecer a el, verdad?- Penso Abigail.

Pues ella miraba hacia todos los lados, hasta encontrar alguna chica que pudiese parecer su tia, y al no encontrar a nadie que se pareciese a su padre ni nadie con ningun cartel que pusiera "Abigail" *eso es lo que se hace cuando esperas a alguien que apenas conoces, verdad?*, se sento en un banco de la estacion un tanto nerviosa.

Un par de bancos mas a la derecha, una chica con expresion muy extraña, con unas pintas hippie antiguas y con 4 piercings en la cara, fijo su mirada en la chica sentada al lado de tantas maletas y bolsas. -Dios mio, me toca aguantar a una princesita- penso Maika, aun sin acercarse a ella -segurisimo que esta es la hija de Ricardo, son clavados. Menudos pijos tengo como familia- penso de nuevo, y entre resoplidos se levanto y fue a recoger a la pobre muchacha que estaba sentada muerta de miedo.

-Eres Abigail? -Pregunto Maika sin mucho interes al acercarse a la chica.

La cara de Abigail fue todo un poema. Nunca se hubiese imaginado que la hermana de su padre, fuese una chica de este estilo. Se parecia tan poco a los otros hermanos... por eso debieron de perder el contacto -penso Abigail, la cual aun no habia salido de su estado de shock al ver la chica poniendose delante suyo. Maika, que no queria perder mas tiempo, espetó:

-Se lo que estas pensando, me he quedado con la misma cara que tu. Me toca aguantar a una princesita como tu papi Ricardo o tu mami en casa otra vez mas, desde que me fui de casa no he tenido que convivir con los pijos refinados, cosa que agradezco, asi que hagamoslo rapido; nos vamos, duermes y mañana temprano te llevo a la academia del patinaje ese para que estes con mas niños y niñas pijos como tu que se ponen trajecitos de esos con purpurina ajustados durante todo el dia. Ok?

-Se llaman maillots- dijo Abigail un poco mosqueada- y encantada de conocerte tia Maika.

Maika hizo un gesto casi imperceptible con la cabeza, y le dijo a Abigail que se apresurara. La chica, se levanto e intento coger todas sus bolsas, a lo que no pudo por el gran volumen de las maletas, a lo que Maika perdiendo la paciencia volvio a espetar:

-Necesitas tanto equipaje? ya podrias haberte traido menos... igual que cuando ibamos de vacaciones y las maletas de mis hermanos ocupaban todo el maletero y los asientos de atras- hizo un suspiro y cogio una maleta y dos bolsas- con eso podras, no? Pues venga, que no tengo todo el tiempo del mundo.

Abigail seguia en estado de shock por el caracter de su tia, que le estaba sacando de quicio a los 5 minutos de haberla conocido. En el camino hacia el coche de Maika, penso en escribirle un largo mensaje a sus padres 'agradeciendoles' que le contaran el caracter de su queridisima tia, que los consideraba a todos una panda de pijos insufribles. Yendo hacia el coche, iba contemplando la gran estacion, alli todo era enormemente grande y bonito, pensaba ella. Dejaron atras la estacion y en esa misma calle estaba el coche de Maika, a lo que se encaminaron hacia el sin perder demasiado el tiempo.