La última de las guerras.

#1

    6:30pm.  Esperanza ... Es lo único que pasaba por mi cabeza. Cada atardecer es                                                                        el inicio de una nueva masacre... Todos los días subía al techo a la misma hora para sólo                          contemplar el atardecer... Mi madre me dijo una vez que "hay una esperanza en lo más hermoso". 

No se te hace tarde?- pregunto una voz que reconocía con facilidad- deberías empacar ya- dijo mientras subía las escaleras. 

Hola Rebeca- dije sin voltear a verla- pensé que volvías a las siete. 

Así es- me dijo mientras se sentaba junto a mi- pero quise volver temprano.

Y que ocurrió con liht?- mis ojos seguían clavados en el cielo- pensé que vendría contigo. 

Pues...- se escucho el cambio de tono - mañana la enterraremos. 

Que le ocurrió? - por fin mi vista se dirigió hacia ella - como murió? 

No quiero hablar de eso ahora - decía mientras sus ojos color miel se cristalizaban.

De verdad lo siento rebeca - le dije mientras le daba unas palmadas en la espalda. 

Eso ya no importa - decía mientras se colocaba uno de sus mechones rubios detrás de la oreja.

La verdad es que le afectaba, liht había sido su compañera durante tres años.  Una vez le salvó la vida. 

Bueno se te hace tarde - dijo mientras me dio un golpe en la espalda - Blaze te espera abajo. 

A dónde vas? - dije mientras recogía mis cosas - tomaras el turno de noche? 

No, iré a buscar a Jhors - dijo mientras bajaba las escaleras - tiene que pagar por lo que hizo.  

No puedo creerlo, Jhors de verdad mato a liht? Sí yo fuera el escaparía en cuanto antes. Rebeca no tiene piedad de nadie.  Y más cuando se trata de  vengar a alguien como liht. 

Baje las escaleras mientras observaba el pasillo rocoso que lo rodeaba. Empece a caminar mientras escuchaba mis propios pasos y los de rebeca mientras se dirigía a la puerta.  Estaba concentrada en lo que haría esa noche y la verdad es que me daba miedo, miedo a tener que matar.                                           Llegue a la entrada de la casa la cual estaba muy oscura debido a la situación. Desde qué los líderes separatistas entraron en guerra la situación económica ah estado terrible, pero aveces no queda más que acostumbrarse.   Tome una linterna que se encontraba cerca y así pude iluminar parte de la sala para poder buscar mis cosas. 

No se te hace tarde? - oh por dios, enserio me asuste al escuchar  esa voz, y lo peor es que no era la primera vez que la escuchaba, sabía exactamente quien era. Pero no se asustarían al escuchar una voz en plena oscuridad y que no hayas  visto ?. 

Me quieres matar de un susto? - decía mientras me tomaba del pecho. 

No deberías asustarte con facilidad. 

Es enserio? Qué me escurra de noche por bosques y calles no significa que no me asuste. 

Hay lexa, tienes tanto que aprender. 

Dudo que algún día llegue a estar a tu altura darlyn - dije mientras la iluminaba con mi linterna - como supiste que... Sabes que? Mejor ni te pregunto...

Podré no tener vista pero sigo escuchando.

Voy ah empacar - dije mientras caminaba hacia la habitación - una pregunta, sabes donde esta mi pistola? 

Sobre la cama. 

Entré a mi habitación a buscar mis cosas. Mi mochila, mi arma, mi cuchillo, mi agua y  mi linterna. Los coloque todo en mi bolso y me di una ducha con la poca agua que había, un pequeño balde oxidado de agua fría. Me seque y mi mire al espejo que tenía al frente y me puse a pensar sí está vez sería capaz de matar a la presa? Salí del baño y me coloque me ropa habitual, unos pantalones bluyin ajustados, una camiseta gris oscura mangas cortas, una chaqueta negra, una bufanda gris, unos  botines militar de cuero y el collar que mi madre me obsequió.   

Ya era hora, hora de irme con la probabilidad de no volver, hora de matar a quien sea aún sí no quisiera.