ELECCIÓN

XI- LA SORTIJA

NARRA JACK

- yo.... - no tenía idea de que responder pues no estaba seguro de querer decirles la verdad sobre mis sentimientos

- hola chicos - aquella voz que había intervenido pertenecía a Lane

- bien yo me retiro - dijo Deanne mientras se ponía de pie ya lista para marcharse

- ¿no tomaras tu desayuno? - pregunto Loise confundida

- no, de pronto se me borro el hambre - respondió antes de marcharse

NARRA ELSA

"Jack de nuevo"

Por que tenia que aparecer justamente ahora que era tan feliz con Jacob, tenia una vida mejor sin él, pero ahora había regresado a arruinar todo de nuevo

- Elsa - habló Jacob a mis espaldas, sacándome de mis pensamientos -hay algo que debo decirte - podía notar su nerviosismo a simple vista pues él no era un hombre al que pusieras nervioso con algunas palabras

- claro, dime - le respondí con curiosidad

- bueno yo - dijo aun mas nervioso -yo...- las palabras se habían agotado pues se quedo callado por un instante, entonces garraspeo para aclararse la garganta y por fin comenzar a hablar de nuevo - llevamos ya tiempo viviendo juntos y yo quería saber si tu ...- él nerviosismo volvía a sus palabras

- si continua - le respondí ansiosa

- si tu aceptarías ser mi esposa - dijo con felicidad y miedo a la vez

Su propuesta la había esperado ya por tanto tiempo y ahora lo estaba haciendo, me sentía inmensamente feliz

- oh por dios - dije mientras me cubría la boca con las manos

- que dices Elsa - dijo extendiendo los brazos hacia amí mientras me sonreía dulcemente

- claro que acepto Jacob - le grité y corrí hacia sus brazos para que me estrechara contra su pecho

- te amo - me dijo mientras acariciaba mi espalda y me daba un tierno beso en la frente

- y yo atí - le respondí mirando hacia arriba, pues él era mucho mas alto que yo, ya que mi rostro llegaba al cuello de él

- espera cariño - dijo mientras me soltaba para introducir su mano en el bolsillo de su saco, y después de un pequeño momento de búsqueda, sacó una pequeña caja de terciopelo color rojo-vino, la abrió y dentro de ella, en medio de dos pequeños cojines acolchonados se encontraba una sortija de color plata que contenía en el medio un hermoso zafiro color azul celeste con dos diamantes blancos a sus costados

- oh Jacob, no hacia falta que me dieras una sortija - dije mirándolo con desacuerdo

- no te gustó - dijo preocupado - si no te gusta puedo comprarte otra - dijo mientras posaba su mirada en aquella joya

- no Jacob, claro que me gusto - dije posando mis ojos en los suyos - es bellísima, simplemente creo que es demasiado, debiste haber gastado una fortuna en esto -

- Elsa, el dinero no es importante - dijo mirándome con dulzura

- lo se, lo se, pero...-

- por favor Elsa, es para ti, solo acéptala - lo pensé por un momento y sabia que no debía despreciarlo pues seguramente había tardado en conseguir una joya como esa

- Esta bien - le respondí sonriendo derrotada

Le extendí mi mano y él aparto la pequeña sortija de la caja de terciopelo y con sumo cuidado tomo mi muñeca y comenzó a meter aquel hermoso anillo en mi dedo anular, simbolizando y haciendo oficial nuestro compromiso