Tú eres mi inspiración

Capitulo 6

MARATON 1/3

El estrés de mi mamá hoy llegarían a su fin, por fin hoy seria la fiesta de la odiosa Debbie, gracias a los cielos no volví a verla puesto que mi mama no necesito mas ayuda, sin embargo ver a mi mama cansada me estaba preocupando no solo a mi si no que a mi papa.

Hoy era sábado, y me encontraba en un entretenido juego de monopolio con mi papa, Mandy y Daniela, mientras mi mama caminaba de un lado a otro hablando por teléfono.

- Y acabas de caer en mi propiedad págame papa- dije tendiendo mi mano

- Vamos ___________, soy tu padre, ¿tengo que pagar?- pregunto mi papa con una sonrisa encantadora, esa sonrisa que usaba cuando ejercía su carrera, de abogado

- Negocio es negocio, familia es familia, tu deberías saberlo- dije riendo

- Esta bien- dijo mi papa haciendo una mueca graciosa- Daniela te toca

- Ya va Tío- murmuro Daniela.

¿Olvide mencionar que Daniela a mi mama le decía Marie pero a mi papa Tío? Pues si, así como yo fui acostumbrada a decirle a Danielle su madre Tía, cuestión de amistad de nuestros padres como lo mencione anteriormente.

- Dani, paga- dijo Mandy con una sonrisa

- ¿aquí no aplica que seamos primas verdad?- pregunto Daniela frunciendo seño

- No, ser familia no funciona- contesto Mandy riendo

- ¿saben algo?- pregunte

- ¿Qué?- respondieron los tres al unisonó haciéndome sonreír

- Siento que narro la historia en mi cabeza, bueno mi historia- comente haciéndolos reír- es en serio

- Lo mismo me dijiste hace unas semanas- comento Daniela riendo

En medio de bromas seguimos jugando, adoraba estar así con mi papa, no paraba de hacernos reír, de pronto mama entro a la sala con una cara De frustración y enojo, me asusto.

- ¿ocurre algo Marie?- pregunto papa

- ¡si!, mis dos ayudantes han cancelado, ¡no puedo estar sola en esa fiesta!- exclamo mi mama desesperada

- Calma, Marie, debe haber solución- dijo mi papa

- Ya todo esta listo, camareros, reposteros, solo necesito a mis ayudantes, que me ayuden a supervisar todo

No me agradaba ver así a mama, me gustaba verla sonreír, esta fiesta era importante para ella, cada una de las fiesta que organizaba eran especiales, pero esta lo era mas y no se porque, ni me apetecía saber solo me apetecía ayudarla y hacerla sonreír.

- Vale no tendrás dos ayudantes si no que tres- le informe, mi mama volteo a verme

- ¿tres?- pregunto confundida

- Así es, Dani, Mandy y yo ¿no es genial?- pregunte viendo a mis dos amigas, ambas sonrieron, aunque Mandy se notaba insegura

- ¿lo harían por mi?- pregunto mama con el inicio de una sonrisa

- Desde luego que si- respondí

Iba de copiloto, atrás iban Daniela y Mandy con una sonrisa observando todo, al detenernos frente a la mansión de Debbie mis dos amigas abrieron la boca con asombro…

- ¿es sorpréndete verdad?- les pregunte

- Se ve enorme- murmuro Daniela- ¿segura que no es una fiesta de Gala Marie?

- No seas tonta Dani, solo es una fiesta- respondí yo por mi mamá riendo bajando del auto

La fiesta según los cálculos de mi madre comenzarían en una hora y media, por lo que entramos a toda prisa a la mansión, por suerte nos recibió la ama de llaves y no la pesada de Debbie, la fiesta se realizaría en el jardín de atrás, el cual contaba con una decoración dorada y rosa una combinación bastante rara, pero es que Debbie no puede vivir sin el color rosa en su vida.