Capítulo 2

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Narra Logan:

Llegué a mi casa después de estar pensando en aquella chica, debería estudiar biología para el examen de mañana, pero me adentro de nuevo en mis pensamientos oscuros, esa gran parte de mí que me atormenta. Simplemente recurrí a mi solución de siempre, autolesionarme, así es como me sentía aliviado cuando entraba en ese estafo de pesimismo, yo me autolediono cortandome en la parte interna de los brazos y de vez en cuando le doy cabezazos a la pared. Me levanto por la mañana y me acuerdo del examen de biología, mierda no he estudiado casi nada, pero bueno, a ver si me da para un cinco.
No tardo mucho en hacer el examen, diría que soy el primero y eso no suele ser bueno. Además al haber terminado tengo tiempo para pensar y eso para mí no es bueno. Vuelvo a pensar en aquel estúpido accidente. Sé que ha pasado mucho tiempo, pero eso no es algo que se supera rápido. Sucedió así: íbamos en el antiguo coche de mi padre, un Ford rojo, algo viejo, pero tenía su encanto. Yo iba hablando con Mel, mi hermana pequeña, de unos cinco años de edad y bueno, en ese momento yo no era consciente de lo que iba a pasar. Un coche perdió el control, pues era un día lluvioso y la carretera estaba húmeda, se pasó a nuestro carril y nos empujó contra la valla de seguridad, esta se rompió y bajamos por una pequeña colina, el coche no paraba de dar vueltas, los cristales se rompían a nuestro al rededor y en ese momento vi a mi padre y a mi hermana, no pude contener el miedo y mis niveles de adrenalina estaban disparados, así que me desmayé. Lo que recuerdo a continuación es sentarme en la ambulancia, mientras un hombre me ponía oxígeno y me calmaba. Empecé a respirar con mas normalidad y en ese momento subo la cabeza para mirar a la escena que me rodea. Me quedé sin respiración de nuevo...
Veo a mi hermanita, mi pequeña Melissa, tirada en el suelo y mucha gente con uniforme rodeándola. Se me cayó el mundo al suelo, por aquel entonces yo tenía solo diez años, un niño que no tiene idea sobre las mierdas que suceden, que vive feliz en la ignorancia. Nunca más pude ser ese niño risueño, con la risa tonta todo el día. Simplemente dejé de ser un niño.
Al salir del trance me di cuenta de que me caían lágrimas por las mejillas y decidí secarlas antes de que alguien las viera. Sonó el timbre y mi necesidad de correr hacia mi casa era enorme, pero mis ojos se posaron en esa chica, ¿Ellie? Como no me acordaba bien de su nombre pensé que ya tenía una escusa para empezar una conversación y realmente, no me equivoqué del todo.

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No se que poner aquí XD

Amor SuicidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora