número #7

144 32 15
                                    

¿Yasir?, ¿Aleimy? Si continuaba así jamás terminaría.

Con una taza de té y revistas basadas en nombres para bebés, el ojiazul permanecía recostado en el acolchado sofá, que dejaba a la vista el penumbroso jardín.

—nose como llamarte, copito—se quejó, aventando la quinta de veinte revistas que tenía en la mesita de centro.

—si tan solo...—una alocada idea pasó por su cabezas y rió de la vergüenza.

«no es malo saber» pensó y de un salto, bajó del sofá encaminándose a la oficina de su padre. Él se encontraba de viaje como solía hacerlo comúnmente. Su empresa incremento con gran éxito, convirtiéndolo en un hombre de negocios.

—debe de estar por aquí —tecleó con urgencia en el ordenador.

Lo había encontrado.

Con las manos sudorosas y rogando por que su lengua no se trabara, marcó los números indicados.

—¿señora Tomlinson?—Louis se puso pálido.

—Ha-Harry soy yo— articuló tartamudeando.

—hola Lou—una sonrisa de idiota se formó en sus labios. Amaba escuchar cuando Harry le llamaba por su apodo.—¿pasa algo? ¿te sientes mal?

—sí, estoy bien.

—¿entonces?

—sé que sonará raro, pero... verás, quería saber si...

—continúa.

Louis suspiró —olvidalo. Buenas noches Hazza.

—¡espera!—suplicó.

El corazón de Louis se aceleró y sentía que en cualquier momento caería inconsistente.

—¿s-sí?

—dime.

—es algo sin importancia.

—Lou—de nuevo ese bella palabra.—¿no me tienes confianza?

De nuevo era él quien ganaba las incoherentes discusiones.

—¿cómo te gustaría ponerle a tu primer hijo?

Cerró los ojos, esperando sólo la respuesta de el rizado.

—Darcy—dijo sin rodeos y lo más tranquilo.—sería tierno que mi primera hija se llamase Darcy ¿Por qué?

Louis sollozó—¿aún me apoyas?

—pequeño, no llores. Mira que tus lindos ojos se ponen rojos. Por supuesto que te sigo apoyando... siempre lo haré ¿escuchaste?

El ojiazul sólo hipaba.

—te quiero, Harry— tal vez no fue correcto decir eso, pero fue lo que le nació.

—también te quiero, pequeño y... y a tu bebé. Descansa.

Sus mejillas se tornaron carmesí. Era lo más tierno que había escuchado, desde que le conoció.

«¿escuchaste, cariño?»

——————

Éste capítulo se lo dedico a DulcePanquesito
Gracias por tu apoyo y por tus votos y comentarios. Te ailoviu😘❤

Sweeft Dream[Larry Stylson]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora