PRIMER CAPÍTULO

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Tras un año de instituto, he hecho muy buenos amigos, como Sofía, Laura, Dani, Alberto...
Dani tiene un hermano gemelo, la verdad esque son completamente iguales, de personalidad, de cuerpo, de TODO.
Pero él no se juntaba mucho con nosotros, iba más con los MALOTES.(no sabía que iba a ser lo mejor de mi vida)
por suerte Dani no vive muy lejos de mí.
Mi mejor amiga, Leire, para hacer bachillerato, por no separarse de mí, se cambio a este instituto, en el que estoy ahora.
(...)
Estaba en mí casa sola, un poco aburrida...
Llaman al timbre, la verdad es que no se si abrir porque estoy sola, a ver si va a ser un violador o un ladrón, quien sabe...
Miro por la mirilla y veo a la persona que menos me imaginaba.
¿Que hace aquí?
Sin pensarlo una vez más voy abro esa puerta que nunca he querido tanto.
En el momento en el que abro esta él, con un traje de chaqueta negro, una corbata negra y una camisa blanca. En la mano lleva un ramo de flores.Esta tan guapo....
-Mmm hola, esta tu hermana-
dice él. Creo que casi me desmayo, él niño del que he estado enamorada desde que lo conocí ha venido a mi casa, con un ramo de flores, pero no para mí.
-No.- cierro y me pongo a llorar encima del sofá.
Vuelve a llamar al timbre, otra vez y otra...
Vuelvo a abrir con los ojos encharcados en lágrimas.
Un mes más tarde...
- Mamá adios! Me voy.- le digo a mi madre.
- ¿Con quien vas Valeria?- dice mi madre en tono protector.
Entonces suena el timbre de mi casa.
Abro la puerta.
- Con él- le digo a mi madre dandole un beso en la mejilla para despedirme de ella.

Si él no hubiera seguido insistiendo para que le abriera y yo cuando le abro aparezca el diciendo:
- Mejor, porqué así estamos sólos.
No estaría saliendo de mi casa y montandome en su moto en estos momentos.
- ¿Vamos princesa?- me dice para que me agarre a el.
-Buahh eso de princesa me mata! - pienso sin darme cuenta de que lo he dicho en voz alta.
El suelta una pequeña carcajada, normal si es que más tontas que yo no las hay.
-Te quiero más que a nada- me dice haciendo que me sonroje.
-Yo si que te quiero pequeño- digo apretando mis brazos y pegando mi cuerpo más al suyo.
- ¡¿Pequeñoo?!- me pregunta molesto.
- eres una pequeña bola de pelo, Jesús.- le digo riendome.
El se rie y acelera más haciendo que me agarre mas fuerte.

 Un Amor InesperadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora