Prólogo

23 1 4
                                    

¿Quién diría que es posible vivir de algo que comenzó como un simple juego de niños? Pues sí, si se puede, y eso es lo que me paso a mí. Me llamo Richard Smith, y así fue como me convertí en un espía de alguien que me espiaba, o mejor dicho "El espía de un espía"

El Espía De Un EspíaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora