EL PINGÜINO

CAPÍTULO III | LA PUERTA

Volvamos con la niña. Ella estaba muy sorprendida. Quería seguir leyendo aquella historia, pero estaba muy cansada, y tenía que buscar una película. Pero tenía todo el fin de semana para hacerlo. Se tomó una ducha rápida, y más tarde se fue a cenar con su padre. Cuando estaba echada en la cama no conseguía dormir, parece que quería terminar la historia. Le entraban muchas preguntas en la mente;¿Quién era Irina?¿Consiguió el pañuelo? Y más... Se levanto con mucho cuidado de que no se despertara su padre, cogió el cuaderno,encendió la lampara de su mesa y comenzó a leer.

Devuelta al cuaderno.

Había pasado aproximadamente siete meses y conseguí continuar en el gimnasio. Poco a poco iba mejorando mi estado de forma física. En aquel tiempo creo que estaría a finales de primero de secundaria, y resulta que tenía que hacer un trabajo de grupo, cosa que a mi no me gustaba. Los grupos eran elegidos por mis profesores, esperaba que no me tocara a las personas que menos conocía y que menos bien me caían. Llegaba el día de saber que grupo me había tocado. Fui a ver el papel y lo primero que dije al ver la lista fue: Mierda...

Me tocaron con los que menos me hablo, Cristina, Dani, Víctor y Carla.Pero también me tocó con el que más me hablo, Antonio. El trabajo consistía en hacer una presentación en el Power Point sobre el río de mi ciudad, Carnello. Nos reuníamos en casa de Antonio casi todos los días para intentar terminarlo lo antes posible. Cada día que pasaba nos conocíamos más y eso era importante, ocurrió lo que nunca pensé que ocurriría. Ser amigo de Dani y Víctor, y ser amigo de Dani y Víctor llevan consecuencias. La razón es porque suelen hacer bromas, pero unas bromas muy molestas.

La mayor broma que yo recuerde que ellos dos han hecho sería cuando querían molestar a Carla. Pero molestarla de una manera bastante pervertida. La broma consistía en que cuando estaban en clase, Dani le cogía algún objeto de la mochila para que luego se lo quedase hasta el final de la clase. Carla estaría buscando el objeto y se marcharía a su casa preocupada. Dani llamaría por teléfono a ella para informar de que él tenía su objeto perdido, entonces los dos irían a su casa y una vez estando allí le robarán algunas prendas de su ropa interior. Una vez teniendo eso los dos se la venderán a compañeros de la clase, a menos que Carla se la compre por un buen precio. Menuda mierda de broma. Esto fue lo que pasó... Dani se acercó sigilosamente a su mochila para quitarla el primer objeto que se encontró, su móvil. 5 minutos después de que terminaran las clases, los dos cabrones observaban cómo se desesperaba ella preguntando a cualquier persona si había visto su maravilloso objeto. Pero no lo consiguió y se marchó a su casa preocupada. El paso siguiente fue bastante fácil. Solo llamar y avisar. Quedaron en acuerdo para que Dani visitara su hogar a entregarla su valioso móvil. Los dos bromistas caminaron hacía su casa, subieron por el ascensor y picaron a la puerta.

¿Quién es? - Preguntó Carla.

¡Soy yo, Dani! - Contestó gritando.

Abrió la puerta y esto paso:

¡Oh! - Se sorprendió ella.

¿Qué pasa? - Preguntó Dani.

No me dijiste que vendría Víctor. - Dijo ella. - Bueno ¿Me darás mi móvil?

Te lo daré, pero antes déjanos entrar a descansar un poco. Que ha sido una caminata muy larga. - Dijo Víctor.

En aquel momento los dos entraron a su piso y se sentaron en el sofá.Una vez sentados empezaron a planear en voz baja. Pensaban en cómo podrían distraer a Carla para entrar a su habitación. Y lo tuvieron, Víctor se quedaría hablando con ella mientras que Dani aprovechara la ocasión. Todo estaba listo.

¿Carla me invitas a algo de beber? - Preguntó Dani.

En ese momento ya estaba ella con tres vasos de plástico y un refresco de dos litros.

Tenéis suerte de que mi madre haya salido a sacar dinero al banco, no le gusta que yo beba esto. - Dijo la chica.

Vaya vaya... Una pregunta ¿Dónde está el lavabo? - Preguntó Dani.

Está por el pasillo, última puerta a la derecha.

Gracias. - Contestó riendo.

Dani se levantó, caminó por el pasillo y en lugar de entrar por la puerta derecha entró por la de la izquierda. Miró la habitación y le entró repelús al ver aquel color fucsia de las paredes. Ignoró el color y comenzó a buscar sigilosamente por los armarios y cajones. Mientras tanto Carla se sentó junto a Víctor.

¿Cómo estas? - Pregunto Víctor.

No estoy mal. - Contestó con un sonrisa.

Bueno ¿Puedo preguntarte cosas?

Vale. - Dijo sorprendida.

¿Cantante favorito?

Mmm... No se si lo conoces. Nino Bravo.

¡Ostras! Es bastante antiguo.

Ya, es que no me gusta mucho la música de hoy en día

Víctor se quedó muy sorprendido al escuchar ese gusto. Volvamos con Dani. Acababa de guardar unas nueve o diez prendas en su mochila pequeña.Ya había terminado, no sabía que hacer hasta que vio un ordenador encendido, así que decidió entrar un rato al Facebook.

Víctor y Carla continuaban hablando. Carla se quería poner cómoda, así que se estiró en el sofá y apoyó su cabeza sobre la pierna de él.

¿Qué haces? - Preguntó sorprendido.

Ponerme cómoda, es que estoy cansada. - Dijo ella.

En ese instante Víctor comenzó a acariciar su pelo largo y castaño.

¿Y ahora qué haces tú? - Preguntó sorprendida.

Nada.

Aparece Dani cargando su mochila y le dice a Víctor que habría que marcharse a casa. Carla levanta su cabeza y no quería que se fuera.Víctor se despidió de ella con un abrazo y Dani solo se despidió con la mano. Todo iba bien hasta...

¡MIERDA! - gritó Dani desesperado.

¿Qué ocurre? - preguntó Víctor preocupado.

¡En el portátil de su habitación me dejé el Facebook abierto!

¡Qué! ¿¡Pero tu eres tonto o qué!? - Respondió gritando.

¿¡Y ahora que hago!? Si ve el portátil con mi Facebook podría hacer cualquier cosa y vengarse. - Dijo Dani bastante preocupado.

¡Ya se! Luis mencionó antes que iría a verla.

¡En serio! Creo que me podría salvar.

Entonces aparecí yo por casualidad en ese momento y me encontré a esos dos que se acercaban a mí corriendo desesperadamente.

¡¡Luis!! - Dijo Dani.

Resumiendo.Me dijeron que tenía que entrar a su casa y entrar a su cuarto para salir de su Facebook. Allí estaba yo, subiendo por el ascensor,luego piqué a su puerta y esperaba. Dani y Víctor podrían saber lo que yo estaba haciendo porque les mandaba mensajes a través de mi móvil. Entonces se abre la puerta y veo a ella, entré y me puse cómodo en el sofá. Me dijo que su madre había salido mientras que se dirigía a la cocina. No sabía cual sería el momento para ir a su cuarto. Se acerca con un vaso de agua y me lo da. La razón por la que fui a su casa es porque yo le iba a dejar pinturas de colores,creo que hizo un cómic con eso. Estábamos charlando sobre cualquie rcosa sin importancia durante unos cinco minutos hasta que ella tuvo que ir al lavabo. Entonces aproveché y entré sigilosamente a su cuarto. Les mandaba un mensaje a esos dos de que ya estaba dentro.Busqué, busqué y encontré el portátil, que estaba encima de la cama. Lo cogí y rápidamente salí de la cuenta de Facebook. Cuando estaba a punto de marcharme de esa habitación me encontré en la puerta varias fotos del mismo chico. No sabía quién era, pero tenía una cara a lo Scarface, esa película de 1983. Daba miedo esa cara,así que me marché cerrando la puerta con mucho cuidado de que no se oyera nada. Les mandé el mensaje a esos y se quedaron tranquilos.