Capítulo 2 - "La Casa De Jack"

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Era de día, hace unos cuantos minutos había amanecido, no moriría, no me mataría. Iba a intentar escapar, otra vez, me levanté y busqué mis zapatos abrí la puerta con cuidado y la cerré puse en la primera puerta no oía nada en la otra tampoco y, en la siguiente no se escuchaba nada camine por el pasillo con cuidado hacia las escaleras las baje con cuidado cuando iba por la mitad el escalón hizo un chirrido, miré sobre mi hombro y no había nada, miré por todos lados y no había nada termine bajando las escaleras y fui hacia la puerta que milagrosamente estaba cerrada intenté abrirla y estaba cerrada, ¡demonios!, dije cuando no pude abrirla. Iba caminando cuando mi barriga rugió, se me había olvidado, camine para ver si encontraba la cocina vi una puerta y fui encontré la cocina y vi el refrigerador, me acerqué, y cuando lo iba a abrir...

-¿Que estás haciendo?

Al escuchar eso literalmente di un salto, ¡¿como me había encontrado!? Me di vuelta, ahí estaba él, tenia el ceño fruncido. Intenté actuar normal.

-¡Hola, Jack!

-¿Que estás haciendo?

-Tengo hambre, ¿piensas matarme así?

-No puedo dejar que te mueras de hambre.

-Dame comida.

-Calma, preciosa.

-No me digas preciosa.

-¿Por que no preciosa? Sabes, tu teléfono estaba donando ayer.

Quede en shok.

-¿Como dices que dijiste?

-Si, estaba sonando, un tal Michael, ¿es tu novio?

Dijo y alzó una ceja. Yo todavía no podía creer lo que había pasado.

-¡Tú, hijo de tu mamá, ¿como por que tienes mi teléfono?!

-No puedo dejar que te vayas, tengo que matarte, y ahora tengo más motivos para hacerlo.

-¡¡¡DEVUÉLVEME EL BENDITO TELÉFONO YA!!!

-No te alteres, preciosa, cálmate.

Yo comencé a respirar 1... 2... 3, no lo mates, 4... 5... 6, paciencia, ven a mí, 7... 8... 9, ¡no lo soporto más!  Y le di una cachetada. El sonido de mi mano en su mejilla inundó el lugar. Él me miró asombrado y sonrió.

-Eres fuerte, preciosa.

-Dame-mi-teléfono.

-Cálmate, ¿si? Respira otra vez 1... 2... 3...

-¡¿Como quieres que me calme!? Primero, estoy secuestrada, un psicópata maniático me quiere matar y mis amigos me están buscando, ¿viste? ¡Te lo dije!

-Oye, oye, ¿como que psicópata maniático?

-¡Sí, eso es lo que eres, Jack!

-Sabes, ¡me hartaste, ten tu teléfono! - sacó mi teléfono y lo tiró al piso.

-¿Te costo tanto?

Cuando agarré mi teléfono tenía la pantalla rota, tenia 10% de batería, lo desbloquee, miré los 30 mensajes y 30 llamadas que tenía, los 20 primeros eran de Michael, los otros 30 de Valery.

Alze la vista para ver que él se había ido por enésima vez, no le vi importancia camine hasta la sala, él no estaba allí, miré los mensajes vi el primero era de Michael decía:

-!HOLA¡,BB -si el me llamaba así- ¿que haces?, sabes no pude ir al trabajo porque tenia un dolor terrible de cabeza.

habían muchos muchos mensajes cuando le iba a responder a Michael mi teléfono fue arrebatado de mis manos ¡ PERO QUE DEMONIOS!

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