Tonto sensei <3

CAPITULO #6 CHOCOLATE FAVORITO ESPECIAL SAN VALENTINE

Han pasado meses desde que estuve con kento no sé cómo convenció a mis padres de quedarme con el poniendo pretextos de lo cerca que se encontraba la escuela de su casa y cosas por el estilo *Por una extraña razón eso se me hace familiar* Kento se puso la idea de vivir como casados aunque no lo estuviéramos y yo le sigo repitiendo que NO para mí el sigue siendo mi maestro hasta que me gradué y en varias ocasiones eh tenido que eximirlo de "eso" durante exámenes y pruebas ya que el en gran parte del tiempo parece una bestia hambrienta.

Estando hoy en clases es el "Gran Día" para muchos que tienen parejas y muchos otros que quieren esta oportunidad para confesarse a la persona que le gusta, mi escritorio y el todo el ambiente se envuelve en el dulce y pegajoso aroma del chocolate por el "Día de San Valentine" muchas chicas se me acercan para hablarme y tengo la interminable tarea de rechazarlas con la mayor educación posible y también tengo que soportar las grandes masas de chica con mil y un regalos en total para darle a kento como una muestra de "agradecimiento" o "amistad" ya que también se puede dar el chocolate a alguien de esa forma aunque no me moleste tanto, lo que si me molesta es esa incesante mirada que me pone cada vez que me ve o ve que alguien se me acerca, acaba las interminables horas de clases y en la hora de receso es aún más perturbador con la gran bulla que hacen las chicas al ver que su amiga fue aceptada por el chico que le gusta, camino por el gran pasillo de oficinas y salas donde no se encuentra nadie alejada de tanta gente y buscando tranquilidad siento un leve jalón un kento con mirada picara en forma de molestia se encontraba frente a mí miro a mi alrededor y me fijo que pase justo frente a la jaula de los leones, frente al laboratorio de kento y sobre su hombro observaba la gran torre de regalos que le habían llegado.

¿Y el tuyo? -Dijo- donde está tu chocolate para mí

Yo no tengo nada para ti –respondí-

Ehhh? Como es que mi pareja no me tiene chocolate –dijo con tono de ganador.

Olvídalo no te daré nada – dije firme-. Me di vuelta y salí viendo de reojo la reacción medio dolida de kento.

Sabía que kento buscaba eso de mí y para ser sincero siempre me mantuve pensando en que darle en secreto, al acabar las largas jornadas de clases y después de eso no encontrarme a kento, vi en mi camino de regreso a casa las grandes vitrinas de los locales que se adornaban con chocolates en promoción junto con peluches y rosas por curiosidad entre a una de esas tiendas y me puse a ver la gran variedad de chocolates que había, de almendra, con maní, chocolate blanco, choco menta y libros de cómo preparar bombones caseros, sin darme cuenta salía de la tienda con una bolsa regular de chocolate en polvo y dos tabletas de chocolate negro junto con una señora de edad media que se despedía de mi junto a la puerta del local y dos compañeras más de ellas, apresure el paso junto con la bolsa en la que lleva los chocolates y llegar a la casa de kento rápido donde actualmente vivía, abrí la puerta y me percate aun no llegaba me dispuse a sacarme los zapatos, prender las luces y dirigirme a la cocina me detengo por unos segundos frente a la olla y la hornilla...NO TENGO NINGUNA IDEA DE QUE HACER!!!

Dentro de mi cabeza pasaba la pregunta de ¿Por qué estoy haciendo esto? Aunque lo intentara solo era como un impulso que quería que lo haga aunque aún así no me quedaba mucho tiempo antes de que kento llegara así que me dispuse a comenzar a derretir el chocolate mientras sacaba algunas frutas del refrigerador y las partía en cuadros comencé a hacer unos brownie y mientras esperaba a que terminara su cocción y que las frutas con chocolate se secaran limpie la cocina y guarde el resto de chocolate en el refrigerador, poniendo cada cosa en su lugar y como último irme a cambiar ya que aún me encontraba con el uniforme y a buena hora no se me había ensuciado con chocolate, mientras me sacaba la ropa escuche el ruido de un auto, era el de kento, él ya había llegado me puse una camisa cualquiera y un pantalón largo y corri a la sala a saludarle cuando el entrara.