Se enderezo bruscamente de la cama, estaba asustada, sentia el sudor caer de su frente hasta su mentón.
Habia tenido una pesadilla, pero no una comun y corriente como cuando algo o alguien te persigue, o un fantasma te acosa ... No, la que ella experimento fue diferente, fue, real, muy real, como si lo hubiese vívido en persona.
Trató de calmarse, despues de todo solo fue una pesadilla, pero, un ruido, o mas bien un crujido proveniente de la cosina, la hizo estremecer,asustada, recojio sus piernas abrazandolas, apegandolas a su pecho.
Quedó observando un buen rato la puerta semi abierta de su habitación que conducia a la cosina, proveniente del extraño ruido.
Algo estaba mal, se sentia extraña sentía, como si lo que estubiese pasando, de algun modo, ya lo habia sentido, ya habia estado allí.
Penso lo que estaba ocurriendo por un rato, ahora se sentia una completa infantil.
Ya era lo suficientemente grande como para temerle a ese tipo de cosas, pensó mas seriamente, que tal si fuese algun ladron que quisiese entrar.
Armada de valor, bajo sus pies de la cama poniendolos en el suelo, por un momento aquella sensación regreso recorriendo su cuerpo, a lo que de un segundo para otro se esfumo.
Se levantó de la cama, dirigiéndose a la puerta, tomando la perilla para despues jalarla lentamente hacia ella, abriendola cuidadosamente, acompañado de aquel chillido que hacia al abrirse.
Asomó su cabeza, volteando temerosamente asu izquierda y derecha, encontrando nada mas que pasillos consumidos por la oscuridad.
Mas tranquilamente, extendio su brazo al interruptor de la bombilla para encenderla.
Una vez los pasillos iluminados, casi unos segundos despues, el crujido que habia escuchado la chica minutos atrás, volvio a aparecer.
Temblorosa, caminó lentamente a la cocina, proveniente de aquel extraño sonido, para darse cuenta, despues de encender la luz, el causante de aquel sonido ....
-meow- Mulló el gato para despues irse corriendo por la puerta trasera.
No tenía ni idea de como ese gato píllo habia logrado entrar, pero no le dio mucha importancia, así qué solo dio un suspiro de alivio para despues irse tranquilamente de nuevo a su habitación.
Cerró la puerta, apunto de apagar la luz, escucho un leve golpeteo en la ventana de su habitacion, pareciera que con cada segundo que pasaba, se hacia mas fuerte, entre asustada y confundida, no tenia ni idea, que al encontrar al causnte, la haria estremecer como nunca.
Retiro lenta y temerosamente su dedo del interruptor, girando su cabeza de igual manera, dirigiendo su mirada hacia la ventana.
Aquel gato, ahora con una teticra apariencia, su pelaje negro, casi indistinguible de entre la oscuridad, su mirar profundo, aquella mueca en su rostro, no era digna de un gato, ni de cualquier otro ser vivó, ni siquiera un psicopata demente seria capaz de igualarla.
Golpeaba el vidrio de la ventana, cada vez mas fuerte, contra su cabeza sangrando, parecia no importarle.
Quedó completamente en shok, totalmente paralizada, perdida, fija en aquél mounstro.
No resistiria mas, comenzo a grietarse la ventana.
-esto no es real, esto no es real, esto no es real, esto no es real, esto no es real-.
Repetí mil veces en mi cabeza ingenuamente, con la esperanza de que terminara, mientras me echaba al suelo, con los ojos bañados en lagrimas, sujetando fuertemente mi cabeza.
Logro romper la ventana, balanzeadose contra mi.
Desesperada comenzo a gritar, pero antes que pudiese hacerme daño ...
Me enderece bruscamente de la cama, estaba asustada, sentia el sudor caer desde su frente hasta su mentón.
Habia tenido una pesadilla ...
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