Las fuertes ráfagas de arena azotaban el suelo arenoso, acariciaban al colosal cuerpo del gusano blanco, más adelante, pasando la muralla alta, caminando por un puente de madera sobre un rio circular, Aruka y Kiura avanzaban, la joven mirando al imponente castillo dijo:
-Vaya, vaya, nunca pensé que era tan jodidamente grande, creo que será un poco cansador llegar al viejo, ¿debería volar? Jiji.-Olvídalo-dijo Kiura.-¡¿Ha, porque lo dices, para que tengo alas he?!-le critico Aruka molesta.
El joven se detuvo delante de ella que se extrañó, de reojo le dijo serio:
-Se me hace imposible creer que el maestro nos ponga las cosas tan fáciles, posiblemente haya trampas puestas ante tu habilidad de vuelo.-Jajá, ¿y a mí que me importa eso o tal vez…?-dijo la joven sonriendo toda diablilla.
Corriendo llego hasta su lado exclamándole emocionada:
-¿Es envidia porque tú no puedes volar, no? Jeje, soy superior a ti, admítelo ya.-Hasta hace unos instantes estabas quejándote de tus alas y… ¿ahora te agrandas?-dijo Kiura indignado-¡Ho bueno, las cosas cambian, jeje!-exclamo riéndose rascándose la cabeza.
Kiura suspirando continuo caminando, Aruka siguiéndolo exclamo vivaz:
-¡Esta bien, no volare si el capitán dice eso, lo hago únicamente porque sería hacer trampa en el examen!-No me gusta el título de capitán, simplemente somos dos discípulos entrenando, nada más…-dijo Kiura fríamente.
Aruka chistando caminando se cruzó de brazos diciendo:
-Joder, sí que eres mega ultra aburrido, deberías…
De golpe sintió un fuerte ardor en sus alas, abriendo bien sus ojos chillo:
-¡Neaaggg, ¿pero qué cojones, que mierda me pasa?!-¿Y ahora que sucede? Menuda molestia…-dijo Kiura volteando serio.
Se impactó al ver a Aruka corriendo de lado a lado mientras las alas se iluminaban en luz rojiza, chillando pego un grito:
-¡Quema, quema, quema, mis alitas arden como fogata de campamento!
Rodando de punta a punta gritaba ante el incrédulo lobo que le gritaba:
-¡Que…quédate quieta, estúpida, tus alas están brillando demasiado!
Aruka se frenó boca abajo levantando la vista gritando pálida:
-¡No, no, definitivamente es ahora cuando me convierto en un monstruo, haz algo maldito sarnoso!-¡Aguanta ahí!-exclamo Kiura.
Lanzándose veloz pensó: “Desconozco los síntomas que sufre Aruka pero algo sé muy bien”, mirando las alas brillosas, pensó con ojos penetrantes: “Esas extremidades aún están muy inestables y volátiles, por su bien tendré…”, tomando el mango de su catana enfundada exclamo:
-¡Deberé cortarlas, es la única manera!-¡Iaaaggg, definitivamente no, ni te atrevas, aléjate de mí maldito loco!-grito Aruka revoleando las manos tirada.
De golpe las alas se agrietaron todas como si fueran cristales, Aruka sorprendida las miro de reojo y Kiura se frenó asombrando pensando: “¡¿Pero qué…se están quebrando?!”
De golpe las alas estallaron como vidrios en miles de fragmentos cayendo brillosos sobre la atónita joven, no había quedado rastros de sus alas en su espalda, solo un agujero en la ropa, Aruka arrodillándose miro asombrada su alrededor cristalino, juntando los fragmentos con sus manos chillo:
-¡Nooo, ¿Qué diablos les paso a mis alas, porque se destrozaron como espejos?!-Posiblemente…Cristalizacion-oyo a Kiura.
La joven sorprendida le vio delante, inclinándose dijo serio: