Uh, siento mucho si estoy cargando mucho, pero es que simplemente tengo mucha rabia encima, ayer cuando volví a la habitación después de escribirte, resulta que el tal Harry se quedará a dormir, pero no en cualquier sitio, sino ¡en mi cama! Además, hoy he tenido un día de perros, bueno, pero eso para ti no es novedad. Ahora tengo que irme, mañana te cuento como me fue todo.
Flashback.
Me desperté con un dolor de espalda increíble, miré el horario de clases, por la mañana, tres horas, descanso para tiempo libre, y a las dos comenzábamos otras tres horas. Una sonrisa se me formó al ver que las tres horas de mañana eran ballet, imagino que una clase de calentamiento, otra clase técnica y luego comenzaríamos a marcar los pasos para la coreografía, me había comentado mi madre que a veces hacían el cisne negro aquí y que era impresionante verlo, mi madre es una profesora muy importante en Manchester, por lo que me llevaba a ver muchos recitales, musicales, ballets, óperas... Pero nunca tuve la suerte de ver uno de esta escuela. No voy a mentir, quiero dejar un nivel muy alto, quiero destacar.
Hice maniobras para coger las toallas y la ropa para ballet, lo intenté estirando los brazos, nada, lo intenté con las piernas, nada, lo intenté apoyando un pie en la cama, fracaso absoluto, me caí, lo intenté de todas las formas posibles, pero de la única en la que lo conseguí fue colocándome encima de Harry. Intentando no establecer ningún contacto carnal, saqué el maillot, mis medias, las zapatillas y cogí una camiseta para colocarla encima al ir a clases, al igual que unas zapatillas, no iba a andar con las puntas los ahí, como si nada, además de lo incómodo que sería. Me bajé pero unas manos me masajeaban los muslos, yo me asusté al ver a Harry meter sus manos en la cara interna de mis estos, yo le di un golpe en la mano y luego hice lo mismo en la otra y me quité de encima, menos mal que seguía durmiendo, no soportaría escuchar su voz por la mañana nada más despertar. Me cambié y me hice un moño resistente, me hice un moño y me miré al espejo, las costillas, las costillas eran lo que más me molestaba de mi misma.
Salí del baño vestida con mi maillot negro y las medias rosas, comencé a estirar, primero los pies, como siempre. Me apoyé contra la pared después para comenzar a estirar la pierna derecha, la que más me costaba. Cuando terminé de estirar escucho unos aplausos, me giro y ahí estaba él, con los rizos despeinados y mirándome el cuerpo, para especificar más, los pechos, que al no llevar sujetador se me notaba el frío que tenía.
-¿Hace frío?- preguntó burlón- me equivocaba, eres una chica muy atractiva, aseguraría que tu madre es española por las curvas que tienes a pesar de tu extrema delgadez-dijo muy cerca de mi, no le olía el aliento, ¿dónde quedó el aliento mañanero?-con curvas me refiero a que estás muy bien dotada para el ámbito sexual, si fueras actriz porno compraría todas tus películas.
-¿Y eso es un elogio? Por qué estoy por partírte la cara-le contesté yo haciendo lo mismo que el, acercándome a el.
-¿Ah si? Venga-mi mano se estampó contra su cara nada más tuve la oportunidad.
-Yo no soy como las demás, yo no caigo-le dije yo con una sonrisa de satisfacción al ver su cara sorprendida.
Salí de ahí mirando como las chicas iban de un lado a otro, supongo que a las diferentes clases, y yo a coger mi desayuno. Fui hasta el comedor que teníamos en la residencia, miré todo lo que ofrecían para desayunas, surtido de frutas rojas, uvas, kiwi, cereales muesli, leche, cafe, y al final me decidí por una manzana. Si engordo en este lugar, malo, por que todo lo que vi es dieta. Salí del comedor para dirigirme a las clases, mejor llegar temprano que tarde.
Mis pies se movían torpes debido a que sólo eran las siete de la mañana, alguna que otra chica me sonreía, un gran paso, pensaba que me iba a pasar lo de siempre, que no me iba a adaptar. Al cruzar el campo llegué a la puerta principal, tiré la media manzana que me sobraba a la basura orgánica y entré, ahora que ya sabía donde estaba cada una de las clases, corrí hasta la de Ballet y para mi sorpresa, en Ballet había varias secciones, como estoy cursando el primer año, me dirigí a ballet uno, peté y entré al salón, la profesora se giró y miró su reloj.
