Capitulo 7 Final

9 2 0
                                    


El sol se estaba asomando de a poco, pero eso no interrumpió el momento romántico de ambos chicos que se encontraban acostados entre la hierba, estaban abrazados y aún en su mundo de fantasía, estaban despiertos y se miraban a los ojos como si se mandaran mensajes de amor a través de ellos. Pero la realidad los golpeó brutalmente en el rostro al escuchar las ramas de los árboles crujir como si alguien se acercara... cada vez crujía más cerca de ellos, los dos permanecían inquieto e inmóviles a la espera de ver quién se acerba...

-¡Lucius tienes que huir!.- salió Marcus de entre los árboles.- los esclavos se dieron cuenta de que no estabas y le avisaron de inmediato a tu padre, ahora él te está buscando como un loco por el bosque, logré distraer a los perros con tus pertenencias, pero en cualquier momento lo descubrirán... logré salir de la casa engañando al esclavo que me estaba vigilando, pero...- Marcus respiraba agitado mientras los otros dos lo miraban sorprendidos sin poder reaccionar.- ¡Que esperan para ponerse de pie! ¿Una invitación? ¡RAPIDO!

-Mierda...- Dijo Lucius poniéndose de pie.- gracias Marcus, puedes volver, en caso de que consigan encontrarme estaré solo, Cornelius es hora de te vayas, haré todo lo posible para volver a verte, por ahora deberías buscar un lugar donde esconderte.- dicho eso Marcus regresó por donde había venido y Cornelius con Lucius se dirigieron en direcciones contrarias, a cada minuto se volteaban para mirar al otro hasta que yo no se veían entre sí.

Lucius corrió hasta ya estar lo suficientemente lejos del lugar secreto que tenia con Cornelius, solo deseaba de que éste pudiera escapar seguro, estaba sentado esperando entre dos grandes árboles cuando escucha el sonido de los perros ladrando a lo lejos, ese sonido lo tranquilizó sabía que si los perros estaban cerca de él Cornelius habría logrado escapar a salvo. Los perros se habían dado cuenta de su presencia y se dirigieron hacia él.

-¡Señor lo encontramos!.- gritó un esclavo, detrás de él venía el padre de Lucius con una expresión de enojo.

-¿Qué estás haciendo aquí Lucius?.- le preguntó al acercarse.- quiero una respuesta sincera de tú parte.

-Salí a caminar y antes de darme cuenta se había hecho de día, solo eso, después de todo tenía varias cosas en las que pensar...

-Más te vale que esa sea la razón Lucius ya me has decepcionado bastante con tus caprichos, espero que todo vuel-

-¡Señor!.- interrumpió un esclavo que venía acompañado con dos esclavos más.- lo encontramos del otro lado del bosque.- lo que traía consigo le produjo un nudo en el pecho a Lucius, los otros dos esclavos habían tirado al piso a Cornelius que a pesar de estar consiente se encontraba inmóvil.

-¿Con que solo? ¿Cierto Lucius?.- el Señor miró a Lucius con desprecio e ira, después miro a Cornelius, se acerco a él y levanto su rostro con una mano.- maldito plebeyo que le has metido ideas raras a mi hijo, ignore el asunto una vez, pero no habrá segunda, llévenselo.- le ordenó a los esclavos. -¡Espera! ¿Qué piensas hacer con él? ¡Padre!.- Lucius tenía un tono desesperado que hasta su padre lo noto.

-Sabes muy bien lo que le pasa a ese tipo de gente, no entiendo porque te preocupas tanto por ese plebeyo, puedes conseguir amigos mejores que ese...

-No es mi amigo...- susurró Lucius.

-¿Qué has dicho? No he podido escucharte bien.- el Señor se volteó para mirarlo.

-He dicho que no es mi amigo, padre a ese hombre yo lo amo, ¡CORNELIUS ES MI AMANTE!.- por  primera vez en toda su vida Lucius había mirado a los ojos a su padre, éste último se acerco a Lucius y le dio un golpe en el rostro lo suficientemente fuerte como para derribarlo.

solo pido una cosa y es tener un final contigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora