((EN EDICIÓN.)) No mires atrás.

Capítulo 1: Una navidad. (En edición)

[sí alguien lee esto, me encuentro editando los capítulos para que sean más aceptables y corregir los hilos argumentales, de ésta forma salvaré la historia. De antemano (´༎ຶ ᵕ ༎ຶ) disculpe la interrupción]

“Es momento de regresar a clases, mi parte favorita de cada año, después de divertirme con mis mejores amigos nada mejor que alimentar mi cerebro de cada nueva palabra en esos hermosos libros” decía para si mismo aquel chico de complexión delgada del cual sus cabellos azabaches se perdían discretamente entre el dobladillo de un gorro que siempre vestía; sus ojos de un azúl cómo el más claro y deslumbrante cielo por algún extraño motivo, se detuvieron en la ventana de su habitación, permitiéndole observar la casa de su vecino.

–Hoy es el día.– un leve sonrojo se hacía notorio en sus mejillas al ver la casa de aquel chico pelirrojo que llevaba más de 3 años haciéndolo suspirar, sintiendo su corazón acelerar con cada mirada. –Ahora tengo 18 años, creó que podré tener el coraje suficiente para confesarle que desde aquel día, robó mi corazón.–

***FLASHBACK***

–Mi familia no estará en casa en navidad.– decía el pelinegro mirando el cielo con tristeza sentado junto a el famoso pelirrojo en su habitación, estaba cuidando de él ya que su madre estaba de viaje al igual que los padres de Edd.

–La mía tampoco. –  decía acomodándose en su cama con cuidado para no lastimar más su pierna, la cual había fracturado en un accidente aprendiendo a usar su motocicleta nueva –bueno, mi madre.–

–Creí que estaría contigo el día de navidad este año.– decía un poco nervioso al ver a su acompañante de esa manera tan melancólica, con un aire solitario a su alrededor.

–No, esta tan concentrada en buscar un nuevo esposo que olvida que tiene un hijo.– miraba ligeramente por encima de su hombro, con sensación de furia por la ventana, aquellos profundos y llenos de tristeza ojos verdes se perdían en sus propias palabras. –esto apesta.. Una navidad solo de nuevo, ¿Vaya tradición, eh?–

–¡Pasemos la navidad juntos..!– tanto el pelinegro cómo aquél chico de gorra roja se habían sorprendido por las palabras del menor, más sin embargo logró tomar valor y prosiguió ahora en un tono de sugerencia. –D-Digo..Sí gustas, puedes pasar la navidad, en mi casa. Tenemos una linda chimenea y puedo preparar casi cualquier platillo. Sí tú gustas, puedes quedarte en mi casa, para pasar la navidad.–

No podía ocultar semejante color rojo en sus mejillas pero hacía un buen intento por ello. Más sin embargo su cara se torno tal color tomate cuando el pelirrojo colocó su mano sobre la suya con una sonrisa comprensiva y radiante.

–Me encantaría.– acepto con esa expresión relajada en su rostro, incluso para él era difícil asimilar la situación, pero parecía satisfecho con ello. Después de que hicieran una estafa juntos a escondidas de Eddy, sus lazos eran más cercanos. – Pero debes jurar que no vas a cocinar cosas con el horrible brócoli.–