¿ Por qué a mí ?

Es imposible......

¡ Por fin ! Hoy es viernes y por fin ha llegado el día que llevaba esperando durante toda la semana. A parte de que es el último día de instituto de la semana hoy por fin es el día de las carreras de motos que llevaba esperando desde que Jessi me lo contó el Lunes.

El Martes cuando fui al instituto lo primero que hice fue ir a hablar con Jessi para que me contara los detalles. Cuando hable con ella vi un brillo en sus ojos al hablar de la carrera, de las motos que habría, de lo que podían hacer, de lo que ella hacía. No sé por qué pero la veo más emocionada con esta carrera que con las demás a las que hemos ido. Puede que sea por qué es la primera del año y normalmente es una de las mejores carreras que hacen, pero ella ya ha ido muchas veces a la carrera del principio de curso. Yo también estoy emocionada, pero no tanto como ella.

A parte de esto no ha pasado nada importante. Nacho desde el " incidente " en mi casa no para de mirarme. Es un poco incómodo pero puedo con ello.

Ahora mismo estoy en mi cuarto con Jessi preparándome para la carrera. Me he puesto unos vaqueros negros ajustados rasgados, una camiseta negra por el ombligo y que deja los hombros descubiertos y por último mis botas militares para poder ir cómoda.

Si ya lo sé, voy toda de negro, pero es que todos vamos prácticamente igual. No es que seamos góticos ni nada de eso, pero nos gusta mucho ir de negro. Jessi va prácticamente igual que yo, pero ella en vez de llevar la camiseta negra la lleva blanca con las palabras fuck you en el centro marcadas en negro.

Aún falta una hora para estar allí, pero siempre nos preparamos antes para poder ir allí y practicar. Estaba cojiendo mi chaqueta de cuero negra cuando veo que Jessi va en dirección a la puerta.

- ¿ A dónde vas ? - le preguntó confundida. Cuando se gira la expresión de su cara es abrumadora, como si no supiera que decir.

- Ehh, tengo que ir un momento a casa. Mi hermano necesita mi ayuda con el coche. Ya sabes lo de siempre. - dice Jessi. Más tranquila que antes.

- ¿ Ha vuelto a rallar el coche ? - pregunté graciosa. Desde que conocí al hermano de Jessi, como hace unos 2 años, ha rallado el coche más de 10 veces. No sé cómo lo hace - No sé cómo tus padres le siguen dejando comer el coche. Algún día lo romperá - dije riéndome. No sé por qué pero cada vez me reía más, no podía controlarlo. Al cabo de un minuto estaba sentada en el suelo con dolor de estómago por las risas y con lágrimas en la cara. Parezco tonta.

- Eres tonta- dice mi subconsciente.

- Cállate- digo enfadada.

- ¿ Pero qué te pasa ? ¿ Por qué te has puesto así ? - pregunta Jessi también riéndose un poco. Supongo que será por mi, no por lo de su hermano. No la juzgo, ahora mismo mi risa parece la de una orca siendo asfixiada.

- Esque.... No.. Puedo evi....tarlo - dije secándome una lagrima de la cara - no se ...que me ... está pasando - dije cuando me volvía a entrar un ataque de risa. Seguí así bastante rato, se ve que Jessi me envidiaba por qué se puso a reír como yo, puede que más.

Al cabo de unos minutos nos recompusimos, me dolía mucho el estomago de lo que me he reído y creo que después tendré hipo.

- Bueno, Mery me tengo que ir a ayudar a mi hermano. Nos vemos allí - dijo Jessi despidiéndose con un abrazo, al segundo después salió por la puerta.

- Vaya- pensé - su hermano sí que debe de necesitar su ayuda - y como no, las risas volvieron a mi.

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Después de mis incontables ataques de risa por fin estaba saliendo de casa para poder ir a la carrera. Al final coji hipo como me suele pasar cada vez que tengo estos ataques de risa.