- si no gritas te dolerá menos.. -esas eran las palabras de mi padre mientras me violaba
cierro los ojos para ahuyentar las lágrimas mientras continuo mi camino por una parte solitaria del parque. por mas que lo intente y aun a pesar que han pasados varios años, aquellos tormentosos recuerdos siguen taladrando mi cabeza como si hubieran sido ayer.
- mi pequeña maddi he esperado con ansias poder volver a verte..- dice al tiempo que me empieza a tocar de una forma morbosa y para nada respetuosa.
Uno tras otro los recuerdos empiezan a bombardearon mi cabeza, sin que pueda evitarlo. como siempre me pasa en este día, el día en el que todo comenzó ..mi cumpleaños
- maddi querida por que no vienes para que papa te de un poco de cariño..- me dice mientras me dedica una sonrisa maliciosa e intimidante
Estoy a punto lanzar un grito sin siquiera detenerme a pensar si alguien me escucha. Pero el sonido de mi teléfono interrumpe por completo mis pensamientos, contestó sin titubear ya sabiendo de quien se trata gracias al rintong especial que el mismo se coloco sin siquiera consultarmelo.
- espero que sea importante, acabas de interrumpir la mejor follada de mi vida.. -le digo dejando escapar una pequeña risa silenciosa, el siempre tiene ese efecto en mi.
- ja ja ja Mmmm .. Tu humor no es para nada de mi gusto - dice en un tono que me dejo muy en claro lo irritado y molesto que se puso gracias a mi comentario - además en mis tiempos las llamadas se contestaban con un "hola" .
- ya deja el show pareces una mujer en sus días, haciendo drama por todo -digo ya acomodando un poco mis pensamientos y mi humor.
- ya basta maddi - dice en un tono de advertencia - ¿donde coño se supones que estas?da gracias que mamá esta ocupada con la fiesta o ya estaría como una fiera, maddi, debes regresar ya. dijiste que solo serían 15 minutos y llevas casi tres horas fuera de casa. los invitados ya han empezado a llegar y mamá no tardara en preguntar por ti.
- si si, Voy en camino joder.
- hablo enser.. -cuelgo la llamada dejandolo con las palabras a medias. Suelto una pequeña sonrisa por el comportamiento de mi hermano al tiempo que me limpio la cara con las mangas de la chaqueta que por suerte es negra, me quedo observando el paisaje solitario de esta parte del parque. Rodeados de grandes y frondosos arboles que le dan un toque tenebroso y ala vez pintoresco, con esos pensamientos en mi cabeza me encamino hacia la avenida para tomar un taxi.
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- tienes quince minutos para bajar con ese vestido que te compro mamá y una sonrisa en la cara si no quieres que salga afuera y empiece a mostrarle a todos, fotos tuyas de la primaria -dice mi hermano de pie en la puerta principal, al tiempo que se cruza de brazos y se hace a un lado para que pueda pasar.
