Escucho el despertador sonar sacandome de mis pensamientos, había estado despierta por alrededor de treinta minutos reviviendo mi desastrosa fiesta de dulces diesiseis de la que hoy han pasado exactamente tres meses. me levantó arrastrando los pies y entro de forma perezosa al baño.
Dejo que el sonido de la voz de adele me relaje, mientras me dispongo a bañarme. Luego de veinte minutos estoy frente al espejo de mi cuarto en ropa interior y con una toalla en mi cabeza.
Siempre me han dicho que soy atractiva, cosa que yo no comparto. Me quedo observando mi trabajado cuerpo frente al espejo, nunca me había sentido satisfecha con mi apariencia, o por lo menos no del todo; mis ojos avellana los encuentro muy separados entre si, una mandíbula muy pequeña que hace un extraño contraste con unas pobladas cejas negras que sobresalen por el color miel de mi cabello que cae como una corriente indomable hasta algo más allá de mi cintura.
-maddi despierta se hara tarde para la escuela- grita mi madre del otro lado de la puerta sacandome de mi trance.
No contestó nada, pero de forma apresurada entro al armario y cojo lo primero que veo. Cepillo mi cabello y lo recojo en una cola alta.
Cuando bajo a desayunar me encuentro con mi hermano en la cocina preparando unos wafles.
- buen día Waterloo - le dijo mientras tomo una jarra de jugo de la nevera.
- ¿¿waterloo?? -dice robando un poco de jugo a lo que yo le lanzo una mirada asesina - y que rayos es waterloo.
- pero que poca cultura tienes hermanito.
- bueno en fin, ya se esta haciendo tarde ¿quieres que te lleve?.
- no, aria vendrá por mi.
Salgo ala puerta principal con mi desayuno mientras espero que mi mejor amiga venga por mi.
Recuerdo cuando nos conocimos teníamos alrededor de cinco años, aria estaba enamorada de mi hermano, se encaprichó tanto con el que se hizo mi amiga solo para poder verlo. Pero lo cierto es que ninguna de las dos creímos que nuestra amistad llegara tan lejos.
Aria es una joven muy atractiva, ambas tenemos la misma edad, su tez es blanca su cabello rizado aunque prefiere llevarlo liso, cosa que yo no entiendo, es de contextura delgada y de estatura baja. Somos como almas gemelas pero al mismo tiempo somos polos opuestos. Ya que entre gustos coincidimos casi que al cien por ciento pero en otras cosas somos totalmente distintas ella es mas de tacones y yo de tenis, ella de vestidos y yo de jeans, su cuarto es el vivo ejemplo de pulcritud y el mio ..pues el mio de milagro no me he perdido hay adentro.
Me quedo mirando los alrededores de la casa, todo es tan tranquilo. Vivo un poco alejada de la ciudad en una casa hermosa. Es algo antigua pero mi madre y yo no hemos encargado de decorarla y modernizarla. Tiene un amplio jardín que roza con la exageración, rodeado de un bosque con todo tipo de árboles y flores. A lo lejos se ven dos caminos uno lleno de pequeñas piedrecillas blancas para que los autos no se hundan en la tierra en temporada de lluvias y el otro a través del bosque, en ese camino ni siquiera podrían caminar dos personas una al lado de la otra. Ese era el camino que utilizaba cuando volvía de la escuela caminando.
Melisa mi madre es una exitosa publicista y matt mi padre es un comandante de la marina, casi no esta en casa pero siempre me escribe cartas y me trae un regalo de los lugares a los que va que puede variar desde libros, dulces, prendas de vestir, zapatos y una que otra vez si el viaje se prolonga mucho una mascota. Cabe decir que no es mi verdadero padre si no mi padrastro pero lo quiero mas que al verdadero. Frank es el nombre de aquel hombre .. "Mi padre" . es el propietario de una cadena de concesionarios según mi hermano Lucas mi madre le contó que se separo de el cuando yo ni había cumplido un mes de nacer y Lucas recién había cumplido el año. Pero siempre han llevado una buena relacion, mi madre conoció a matt poco mas de un año mas tarde de su separacion, de niña me sentía orgullosa de tener dos papas a los que amaba con el alma pero eso cambio en mi cumpleaños numero once.
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-maddi has estado callada todo el camino y ni siquiera te quejaste cuando pase por mcdonals ¿pasa algo?.
-no es nada solo .. Tengo ..umm.. Dolor de cabeza.
- ok esto es serio. Tu dando una respuesta sin sarcasmo, ¿quien eres y que hiciste con mi amiga?
- estoy bien aria.
- esta bien, que tal si vamos al mall luego de clases.
-no puedo debo ir a violar algún tipo gay que encuentre en la calle - le contesto al tiempo que bajo del auto y entramos a la escuela, nos separamos para ir cada una a su correspondiente casillero.
Cuando llegue a mi casillero y estaba por sacar mis libros fui interrumpida por un grito que invadió todos y cada uno de los rincones del pasillo, hasta podría apostar que se escucho en toda la escuela.
- MADDIIII - rodé los ojos, solo había alguien en todo el mundo que podría ser tan fastidioso.
- owen no estoy de humor, y esta vez hablo muy enserio.
Owen odonell, el típico chico play boy por el que todas las niñas suspiran. Nuestra historia fue un tanto extraña el se acerco a mi y me robo un beso en la fiesta del cumpleaños numero once de aria, estuvo coqueteando con migo durante unos meses (de una forma un tanto ridícula debo decir) . de alguna forma que aún no termino de comprender el se dio cuenta de que algo pasaba con migo y el día de mi cumpleaños, pero hasta ahora no se había tomado el atrevimiento de preguntar algo al respecto lo cual agradecia. Era ese tipo de amigos que podia ser todo un fastidio y un cabeza hueca cuando se lo proponía pero esta para ti cuando lo nesecitas a cualquier hora, lugar o momento.
El peli rojo me queda observando con sus grandes ojos, como buscando algún indicio en mi rostro de que era lo que estaba mal. Owen era un chico muy atractivo a decir verdad. Una Cabellera rojo pastel, unos ojos equivalentes a un par de esmeraldas, un cuerpo fornido y trabajado, notas altas y un gran corazón (aunque pocos tenían la dicha de conocer esa ultima cualidad) el combo completo.
- creo que alguien se levantó con el pie izquierdo - se recostó ala fila de casilleros mientras rascaba su cabeza de forma distraída. Si eras lo suficientemente cercano a owen y lo suficientemente observador, detrás de todo ese porte de chico malo de revista y de su sonrisa podías notar en sus ojos. un niño, un niño curioso, asustadizo y con el corazón mas noble que podrías encontrar.
- por que no vas a follarte a alguna tipa cabeza hueca y dejas que siga mi camino.
- ¿que pasa maddi? - y hay estaba esa mirada, esa mirada que solo el podía regalarte era como la mezcla perfecta entre preguntándote que pasaba y enviándote todo el apoyo.
Yo solo alce mis hombros en un gesto que ni yo misma comprendí, owen no comento nada solo se detuvo y de la nada apresó mi rostro en sus manos me miro por unos segundos que para mi fueron eternos dejo un beso en mi coronaria y luego me abrazo. Eso era lo que mas me gustaba de owen el me entendía, sabia que yo no nesecitaba alguien que me ayudara a repararme cuando me rompía en mil pedazos con saber que estaban hay, para mi era suficiente.
- señorina - dijo en un tono gracioso que me fue imposible no reír ante tal gesto. Abrió la puerta del salón para que yo pasara, por suerte el maestro aun no había llegado de ser así de seguro me enviaba a castigo.
Owen se retiró a su clase y yo busque entre los estudiantes a aria. La vi en una mesa que estaba casi al final ella sonrio al verme y me señalo el asiento a su lado para que me sentara.
- por que tardaste tanto .
Estaba a punto de responder pero mi voz fue interrumpida por la voz del director, algo pasaba para que el estuviera acá. Me sorprendí al ver que se movía como buscando a alguien con su mirada y mi sorpresa fue mayor cuando de la boca del director salio mi nombre.
xoxoxoxoxoxoxoxoxoxoxoxoxoxo
👉👈😳 Hola nenes los amo con mi corazón de nutella.
Chao nenes ✌😳
- 😚
