Además de irnos juntos por la mañana ahora también compartimos el autobús de la tarde.
No me gustan los días en los que el sol te abrasa lentamente, el calor se encaja en cada uno de tus poros y no te deja ser normal. Para quitarme esa sensación de encima me compré una paleta de hielo que por azares del destino y en conjunto con mi mala suerte, se derritió en mis dedos.
Lo dejé pasar, ya que no tenía agua para lavar mis manos.
Al llegar a la parada habitual tú ya estabas ahí y al subir al autobús me dejaste pasar primero.
Por un breve instante nuestros dedos se tocaron y una descarga eléctrica recorrió cada una de las células de mi cuerpo, fue una sensación que está más allá de las palabras y de las letras que conforman el alfabeto.
Porque para mí fue todo.
Pero por desgracia mis dedos estaban pegajosos y de seguro fue desagradable para ti.
Maia Brown
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Las Notas De Maia
Short StoryMaia ha conocido a bastantes chicos que se ganaron una parte de su corazón, pero ¿por qué él tenía que ser diferente? Maia nunca antes se había enamorado, un sentimiento nuevo e indescriptible que hizo que sus neuronas se sacudieran y desconectaran...
