Al abrir la puerta del comedor veo una escena muy....mierda, no se como explicar eso.
Un hombre. Lleno de tierra. Tirado. Con mi cuadro. Y no es cualquier hombre. Es mi jefe. Nicola Porcella.
-Señorita en verdad lo sien....
Se queda callado al verme. Tratando de recordar mi rostro de alguna forma. Y lo logra...
-¿Angie? ¿Angie Arizaga?
-Si soy yo, disculpe la pregunta pero...¿Que hace en mi casa a estas horas?
-¡Ah Angie! Perdón que lo allas encontrado así. El es...
-Nicola Porcella mama, mi jefe.- En verdad... Por que no grabaron eso. La cara de mi madre paso de ser confusión a la sorpresa misma.
- ¿En serió? ¿Usted es él hombre que miraba tan descarad...
-A mama...- ¡Como se atrevía a preguntarle semejante cosa!- ¿Por qué llegaron a esta hora y por qué están todos sucios?- Preguntó con curiosidad y intentando cambiar de tema. En verdad estoy muy asustada, se en que clase de cosas se puede meter mama. Y la mayoría no son buenas.
-Ah....ve- veras....- Noto que las facciones de su cara se fruncen y eso me preocupa.
-Mama....paso algo que tenga que preocuparme.
-Hija....él volvió.
No. Por él amor de dios. No. Él no pudo volver porque ahora. Cuando todo estaba tan bien. Debe ser una maldita broma.
Tan rápido como un impulso corro y abrazo ai madre como nunca lo he hecho. Mi padre volvió y eso solo significa una cosa...-¿Te golpeo?- Me preocupo mucha mas al ver que no contesta- Mama por favor dime si te golpeo hay que hacer una denuncia.
-¡No Angie, ni siquiera lo pienses!- Mi madre mira a mi costado, haciendome recordar a mi descarado jefe que esta a mi costado. No puedo hablar de este tema frente a él y veo que mi madre opina lo mismo.- Hija, Nicola esta aqui porque él me ayudo mucho y me salvo cuando encontré a tu padre en él medio de la calle.
-Oh, entonces, muchas gracias Señor Porcella agradezco.
- No hay de que Angie.
-El pasara la noche aquí, le daremos algo de comer y un poco de abrigo.
-Okay...creo que iré a dormir. Señor Porcella he dejado algo de comida en la nevera ¿Quiere que lo caliente para usted?
-Angie no hace falta que me hable de usted, y le agradecería ya que no soy muy bueno en la cocina.
-No tengo problema Nicola- Digo con una sincera sonrisa y me dirijo a la nevera para calentar la comida. Nada mal para ser yo, fideos con crema y champiñones. Al terminar con mi labor me dirijo a Nicola y le entrego él plato lleno de comida.
-Bueno yo ire a dormir. Él baño por si quieres ir esta subiendo las escaleras en la primer puerta. Buenas noches
-Buenas noches Angie, en verdad muchas gracias a ti y a tu madre por dejarme pasar la noche.
-No Nicola gracias a ti que has ayudado a mi madre. Es algo que te agradeceré permanentemente.
Los dos nos dedicamos unas sonrisas muy sinceras luego de agradecer nos mutuamente y me dirijo a subir las escaleras y tomar un merecido descanso de todo este día.
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~Tu ropa interior~
Novela JuvenilTodo comenzo aqui.La tienda. Mi lugar. TU lugar. Muy pronto conocerán esta historia tan atrapante.