Zayn es un estudiante de arte que pasea por un museo de cera y de pronto, nota una escultura tan diferente de todas las demás, perfectas y hermosa, esta es completa e imperfectamente, aun más bella que todas las demás.
Se acerca a ella con cuidado, viendo que nadie más le presta siquiera atención y notando que de hecho, ni siquiera tiene un pedestal como todos los demás, está colocado simplemente sobre el piso frío.
Zayn se acerca y mientras más lo hace, más bello lo ve. Está de perfil y su pelo es de un rubio sucio y tiene un par de ojos azules que parecen brillar llenos de vida y pecas...oh, incluso tiene pecas.
Extiende una mano casi con miedo de tocarlo, pero lo hace, apenas con un dedo rozando su barbilla y es tan suave y cálida y su piel casi parece real.
Zayn no puede evitar decir "Eres más hermoso que todas las otras obras presentes aquí. Eres imperfectamente más bello que todas ellas. Quisiera llevarte a casa"
Y entonces, una lágrimas cae de la esquina de uno de los ojos de la estatua y Zayn cree tener un paro cardíaco porque las estatuas no lloran.
Resulta que esta sí, porque parpadea también después y se mueve y voltea hacia Zayn y le da un gran abrazo y besa su mejilla y le dice que iría con gusto a su casa porque nunca le habían dicho que era hermoso.
La estatua, no era más que un chico, llamado Niall, queriendo ser tan bello como todas las obras de arte del museo, pero siendo tan simplemente normal, pero su belleza fue descubierta por otro simple normal para quien nunca volvió a existir una cosa más bella que Niall.