-Ahh M-mh- Se escuchó por la habitación, los sonidos eran claramente gemidos, provenientes de un dueño masculino, pues eran ligeramente guturales.
-¡Clint! Ah Clint...- Exclamó el autor de los antiguos gemidos, agregando más vociferantes a su lista. Se podía escuchar con claridad el placer que estos gemidos y jadeos deletreaban.
-Me vengo- Siseó con dificultad el rubio, sujetando con aun más fuerzas las caderas del menor peliplateado.
Unas embestidas más resonaron, haciéndose presente el ruido de las pieles chocar con fuerza. Los ojos cristalinos del menor dejaban escapar pequeñas lagrimas, que corrían por sus mejillas teñidas de un matiz carmín. Clint gruñó por lo bajo, jadeado ante la necesidad de aumentar su ritmo.
Sin pedir permiso previo, sujeto la pierna del menor, logrando su cometido de girar su cuerpo, quedando éste acostado en el suelo, apoyando sus rodillas en el suelo para tener la cadera levanta. El rubio jadeo ante la lasciva imagen, apresurando su cuerpo para quedar alineado a la entrada del menor.
-¡Clint!- Rogó el peliplateado, moviendo la cadera en clara seña de invitación, haciendo más sonoros sus gemidos.
Clint por su parte no tardo en acatar la suplica de Pietro, penetrando de golpe en la estrecha entrada de éste. Obteniendo un grito gutural de placer, a la par de unas lagrimas traviesas que escapaban de sus ojos.
En la posición correcta Clint tuvo la facilidad de embestir con fuerza el punto que hacía temblar de placer a Pietro, dando por consecuencia su inminente orgasmo. Las paredes internas del menos ejercieron una deliciosas presión al miembro de Clint, estando acompañados de pequeños espasmos, lo suficiente placenteros para hacer que el mayor se encontrara en la cúspide de su clímax.
Unos pequeños choques eléctricos recorrieron su espalda, logrando que se arqueara ligeramente, culminando en un calor en el vientre bajo y la tensión de su cuerpo por breves segundos. Abundante líquido blanco salió a presión de la punta de su miembro, llenando el interior del menor.
Con delicadeza Clint salió del interior del peliplateado, deleitándose al ver su propio líquido blanco brotar de la entrada del menor, corriendo lentamente por sus piernas. Se acostó aun lado de Pietro, rodeando su cintura con su brazo, juntando sus caderas, pegando su pecho en la espalda de éste.
[...]
Semana 4
Pietro estaba quieto, totalmente fatigado, había hecho poco ejercicio, muy poco a decir verdad, y aun así sentía que caería rendido al suelo. Lo vio como consecuencia de no poder dormir anoche, y las noches anteriores, pensando que el insomnio era el causante. Estaba ansioso, más ansioso de lo normal, intentaría calmar su estado con ejercicio, pero su cuerpo estaba extenuado. Su hermana Wanda lo había notado hace unos pocos minutos, pero se limito a observar y dilucidar ella misma el por qué del comportamiento de su hermano.
-Pietro ¿Te sientes bien?- Preguntó su hermana, dejando atrás su fase deductiva, ganado la curiosidad.
-Sí, sólo estoy cansado- Explicó sin ganas.
-¿Tú? ¿Cansado?- interrogó ante lo extraño que eso sonaba, simplemente no se puede imaginar esas palabras juntas.
-No he dormido bien, tengo un poco de insomnio- Siseó, incorporándose en el colchón.
-¿Quieres ir a comer algo? Quizá eso te ayude- Propuso afable la castaña, alentando a su hermano a seguirla.
-Claro...- Musitó sin ganas, pero siguió de todos modos a su gemela.
Pietro no salió corriendo poco lo había supuesto su hermana, más bien seguía su ritmo, sin adelantarse más de lo necesario. Ambos llegaron al gran comedor, que para suerte o desgracia del peliplateado se encontraba lleno, los presentes disfrutaban de una comida distinta cada uno.
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¿Embarazo? (Hawksilver M-Preg)
FanfictionUn pequeño descuido puede causar muchas cosas, incluso cambiar tu vida. A Pietro y a Clint le pasara de una manera muy litera. Un condón roto, o el estado etílico de una persona puede significar mucho a la hora de compartir cama, sin duda no hay nad...