Habían pasado cerca de seis meses desde la masacre del Clan Uchiha, Izumi, luego de recuperarse, fue al templo Nakano y leyó la piedra que se encontraba en el subterráneo secreto donde se llevaban a cabo las reuniones del clan. Descubrió que ella había sido capaz de despertar el Mangekyo Sharingan tal y como Itachi lo había hecho, también recordaba haber visto a Shisui con un patrón distinto en sus ojos. Para ella, todo esto era nuevo, si bien ella no era una Uchiha de sangre pura, pudo despertar su Sharingan a muy temprana edad y, luego de presenciar la masacre del clan y esa pesadilla que la invadía cada noche donde Itachi era asesinado por el tipo de máscara, fue capaz de pasar al siguiente nivel y despertar el Mangekyo.
Desde que comenzó a entrenar con Kakashi, su habilidad con su Sharingan había mejorado notablemente. Kakashi, a pesar de no tener sangre Uchiha, era portador del Doujutsu en su ojo izquierdo y, gracias a él, ella pudo perfeccionarse. Los Genjutsus ya no eran una dificultad para ella, con el Mangekyo nada se escapaba de sus ojos.
-Será de mucha ventaja para nosotros que formes parte de un escuadrón Anbu. Nadie sabe que eres una Uchiha y la máscara ocultará tus ojos - Izumi lo miraba atentamente - Has mejorado considerablemente, el manejo que tienes con la Katana es esplendido - Kakashi le entregó su máscara y su Uniforme - Uchiha Izumi... perdón... Sarutobi Izumi, desde hoy formas parte de los Anbu de Konoha y servirás al Hokage, ¿estás lista? - Izumi lo miró con una sonrisa
- ¡Si!... agradezco sus enseñanzas, Kakashi - dijo ella con admiración, los Anbu eran especialistas en misiones secretas y en asesinatos. Ella se sentía preparada para cumplir con su deber y, de paso, podría seguir los pasos de Sasuke. Itachi se sacrificó por él y ella lo ayudaría cuidándolo desde lejos.
-Bien, mañana tendrás tu primera misión oficial. Nos veremos a las 6 am en la entrada de la aldea - le dijo de manera despreocupada Kakashi, a lo que Izumi asintió, Kakashi desapareció en una nube de humo y ella guardó en un pergamino todo su equipo anbu. decidió caminar de vuelta a su casa por el bosque. Le gustaba la tranquilidad que ahí podía encontrar, sin embargo, un pequeño llanto llamó su atención y se acercó a la procedencia del sonido. Entre algunos arbustos vio a una pequeña, de no más de siete u ocho años, con un extraño cabello rosa, quien lloraba con mucha pena.
-Hola. ¿Qué sucede, pequeña? - Izumi se puso a la altura de la niña y ella levantó la mirada con temor, tenía unos hermosos ojos verdes
-Oye, no llores. Tienes unos lindos ojos y no se ven muy bien cuando lloras - la pequeña seguía sin decirle nada - Soy Izumi, ¿cómo te llamas? - Izumi se sentó a su lado y la niña ya no sintió tanto miedo.
- Me llamo Sakura - le dijo en un susurro casi inaudible.
-Sakura, que lindo nombre. Cuéntame, ¿por qué lloras? puedes confiar en mi - Sakura la miró y se sintió extrañamente confiada
-Una amiga me regaló un listón y me peinó para que ya no se rieran de mi frente, pero los niños me siguen molestando y ya no sé qué hacer- Su voz se escuchaba muy triste, Izumi la miró y le sonrió de manera dulce.
-Sabes, a veces los chicos molestan a las niñas porque las encuentran lindas y, como son muy tímidos para decir lo que sienten, intentan llamar la atención molestando o haciendo bromas - Sakura la miró con expresión sorprendida.
-¿hablas enserio? - dijo mostrando una sonrisa, pero de inmediato se desvaneció - si lo que dices es cierto entonces, el niño que me gusta, no está interesado en mí - dijo la pequeña mientras escondía su rostro entre sus rodillas
- ¡Tranquila! Ya verás que él tarde o temprano te verá con otros ojos - dijo Izumi tratando de animarla
- No, él nunca se fijaría en mí, ni siquiera me habla - dejó salir un pequeño suspiro y luego miró a Izumi - Izumi, ¿tu te has enamorado? - Los ojos de Izumi se abrieron con sorpresa, vio la curiosidad en los ojos de Sakura y no pudo evitar recordar a Itachi.

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Destinos Enlazados
DiversosQué pasaría si la misión más difícil fallara sin que lo supieras? El destino a veces sorprende con lo que menos imaginas y su destino definitivamente estaba enlazado a ella. Y mientras el amor de una pareja se hace más fuerte, otra comienza a nacer...