Darkness and light

Parte sin título 3

Sus pasos se aceleraban, los míos se volvían mas temblorosos, a donde iría? quien fuera que me estuviera persiguiendo sabe cada esquina de este lugar yo por mi parte ni recuerdo donde esta el baño, debía salir de ahí..Alguien me agarro del brazo, me tenia, ya no había salida, tenia miedo y no sabia por que, solo lo tenia, se sentía igual que ese día, la adrenalina corriendo por mis venas y mi pulso acelerándose...Comencé a llorar y a pedir que por favor no me hiciera daño..

-HEY!,HEY! CALMATE EMMA!, abre tus ojos, no te haré daño - era Liam, sentí rabia pero a la vez alivio al ver que era el y no alguien que no conocía, que digo? lo conocí ayer y no fue muy bonita la primera impresión, sin saber por que le di una cachetada, el no se molesta es mas le causo risa lo suficiente como para que medio edificio lo escuchara.

-De que te ríes, imbécil?, me estabas persiguiendo, que carajos quieres Liam?

-Me rió de ti, pegas como una completa bebe, ahora puedes calmarte? o quieres que te calme?- se acerco lentamente a mi, me dio un pequeño beso en los labios y luego paso al cuello, no podía detenerlo no podía moverme, sus manos me tenían agarrada y su gran cuerpo me presionaba contra la pared que estaba fría en ese instante, mis instintos llevaron mi pierna a su entre pierna, me soltó cayendo al suelo, decidí irme y eso hice, irme. Pero antes le grite: AHORA QUIEN ES EL BEBE?

Al decir que me iba no me refería a irme a un salón no, salí corriendo hacia la calle, no podía distinguir nada mas allá de centros comerciales, arboles, calles vacías y personas extrañas, no podía irme así sin saber a donde pero eso hice, de niña siempre he tenido fascinación hacia los bosques, con mi familia íbamos cada viernes al bosque, hacíamos fogata, nadábamos en el agua fría y dormíamos en carpas.

Aquel bosque era tenebroso, escuchabas sonidos por todas partes y al intentar ver que es solo ves negro, no puedes diferenciar mas allá de un árbol mohoso pero no me detuve,algo me atraía en ese bosque, era una sensación extraña, era curiosidad, era averiguar que había oculto allí a lo lejos veía una luz muy brillante de color azul, mas me acercaba mas se alejaba, no veía hacia donde iba, no veía el piso, tropecé con una roca y mis piernas de mierda no me ayudaron, pude sentir como mi cabeza se golpeaba contra algo muy duro una roca tal vez, me desmaye...

Me levante y estaba en un lugar mas cálido, la luz me cegaba podía escuchar la voz de mi hermana pidiéndome que por favor regresara,yo no entendía nada no podía verla solo escucharla, pude escuchar la voz de mis padres pero no reconocía que era lo que me intentaban decir, pude verlos, mi madre con un vestido blanco con flores rosadas su hermoso cabello largo recogido en una coleta de caballo,sus ojos verdes brillando mas que nunca y a su lado mi padre quien la llevaba de la mano,me sonreían había pasado mucho tiempo desde que vi esa sonrisas y ya las había olvidado,de repente todo se volvió oscuro mis padres se desvanecían yo gritaba que volvieran, apareció una sombra que se acercaba cada vez mas al lugar en el que estaba yo,me tenia sus manos apretaban mis brazos,yo intentaba moverme pero mis piernas no se movían, era un hombre solo podía ver sus ojos uno de cada color el izquierdo era azul y el derecho era marrón muy oscuro no decía nada solo me miraba podía sentir la maldad en sus ojos, yo pensaba que moriría de verdad lo creía,luego me desperté...De nuevo estaba en el bosque,intente buscar mi teléfono eran las 4  hace 2 horas que debía estar en casa, Laila debe estar aterrada y yo no sabia como regresar, los arboles eran tan altos que tapaban el sol, camine y camine y por fin regresaba a la calle, sentí un alivio en mi pecho,vi el auto de Laila me iba a matar eso lo se, camine lento para poder tener tiempo de limpiar mi ropa que estaba toda sucia por la caída, a mitad de camino me vio salio corriendo a abrazarme y en el oído me dijo: Estas castigada, hermanita...Sin decir una palabra ambas subimos al auto, el aire se sentía tenso e incomodo comencé a escuchar sollozos Laila lloraba, maldita sea lloraba por mi, igual que cuando llegue a su casa con 2 policías detrás, odiaba verla llorar me recordó a aquella vez que rompió con su novio por que le fue infiel, no podía verla de esa manera y menos por mi.

-Laila yo, yo lo siento de verdad - no podía ni mirarla, las disculpas no son lo mio..

-Cállate Emma, no sabes el maldito susto que pase por ti, pensé que habías muerto, que te habían violado pensé todo, ya tengo suficiente carga encima con mis problemas como para tener que cargar contigo.- eso sonó tan frió y tan sincero a la vez, soy una carga.

-¿Cargar conmigo? CARGAR CONMIGO? NO SEAS TAN IMBÉCIL LAILA, NADIE TE OBLIGO NADIE MALDITA SEA Y AHORA VIENES A DECIRME ESO? SI NO TE HUBIERAS IDO MIS PAPAS ESTUVIERAN VIVOS Y SABES QUE PASO? ESTÁN MUERTOS POR TU CULPA, NO TE ESTOY OBLIGANDO A CUIDARME NADIE LO HACE, NUNCA HE NECESITADO DE TI, NUNCA, ME ESCUCHASTE? NUNCA!, O TU CREES QUE VIVIR CONTIGO ES LA COSA MAS MARAVILLOSA DEL MALDITO PLANETA? OJALA EL MALDITO ME HUBIERA MATADO ESA NOCHE A MI TAMBIÉN PARA QUE TU NO TENGAS QUE CARGAR CONMIGO.

La ira me recorría la sangre, de mi pecho a mis puños quería golpear algo a ella tal vez, Laila solo podía verme no decía nada, era la primera vez que le respondía así, aunque una parte de mi estaba molesta la otra quería llorar, ella era la única persona que tenia, que me quedaba...

-Emma perdón, si?

-Si, puedes irte al demonio.