Un Extraño Me Llamó Eiden Green

Parte XIII

-¿Que pretendes lucas ?

-No , no;  no es lo que yo pretenda, ahora mismo es lo que yo necesite y
ya no hay vuelta atrás, ya se que estás aquí, tengo prueba de ello y no puedes mentir más.

-Jamás mentí, el hecho de no decir nada no involucra mentir.

-Hablo de aquella  vez que dijiste delante de todos, que todo lo que decía de ti era mentira, por eso quede sin nota y reprobado, así que no lo he olvidado.

-Ya eso ya pasó.

- Que fácil decirlo.

-Eso que importa.

-No quiero perder más tiempo, te tengo en mis manos, y lo digo muy
literalmente.

- El hecho que sepas que estoy aquí no quiere decir nada.

-ya basta Eiden!
Ese niño dijo que le hablas de mí,
Me lo contó, lo único que quiero es salvar a Juan, que esta en no se donde,  por mi culpa , y no es nada personal
Pero sabiendo que no eres la programadora, me debes ayudar en este nivel.

- No puedo hacer eso.

-Si no me me ayudas, entraré en ese cuarto y le diré a ese niño lo que en realidad haces.

-Tu no harás nada, y el sabe mas que tú, así que ve y dile lo que quieras, la verdad pensé que eras mas inteligente, no me vengas a querer chantajear idiota.

-Ya no tengo límites Eiden.

-Conmigo si.

-Te equivocas, nunca representaste eso para mi.

-No puedo ayudarte.

-Si puedes ¿quienes son los creadores?

-Debes descubrirlo por ti mismo.

-ok,iré hablar con Chumi.

-Déjalo en paz.

-El tiene mucho que contar aún.

-Lucas?

-ya dije Eiden.

(Entré al cuarto de nuevo y Chumi estaba en la puerta y me mira)

— Paso algo? Es que casi olvido que ustedes no se llevan nada bien.

—Tranquilo Chumi, ya Lucas se va.

— Te equivocas Eiden, los planes cambiarán ahora; te vas a sentar y vas a escuchar lo que tengo planeado hacer.

—  Fender, no es momento para que te pongas creativo.

— ¡Necesito que este vez me escuches!

— Esta bien.

— Debes ayudarme.

—   No puedo, no puedo.

_  Debes poder, sin ti no puedo ganar.

— No tengo tiempo.

—Está bien Eiden,no voy a rogar, te espero en mi casa.

— ¿porque confiar en mi?

— No me queda de otra.

—  No deberías.

(Me acerco a ella)

—Mira Eiden, esto me esta matando, necesito salir de esto lo más rápido.

—listo.

—Sólo dirás listo?.

—Sí

—Te espero.