Capítulo 9

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-Veras... mi padre conoció a tus verdaderos padres y resulta que eres un celta que tiene el poder de ser inmortal gracias a el anillo que tienes en tu dedo, por cierto, ya te dije lo sexy que te ves con esa camisa.

Estaba en mi habitación hablando con mi jirafa de peluche, mañana le diría a Kenneth toda la verdad y por más que practicaba a un no sabía que haría para que no me tomara por una psicópata.

-Sabes tal vez deberías cambiar lo de sexy y decir algo como "te quiero solo como amigos espero que lo entiendas" –Connor se sentó a mi lado en la cama

-¿Qué haces en mi habitación? Y ¿Porque estas vestido para salir? –Tenía puesto unos jeans negros y camisa blanca con sus tenis blanco también.

-Tengo una cita

Tomo mi celular y reviso la hora, son casi las 9 de la noche

-¿Cita con quién?

-Ehhhh lo sabrás pronto –Se paró y se acercó a el espejo, reviso su cabello oscuro y se acomodó la camisa, se le veía nervioso que es algo raro en él.

-Ponte la chaqueta de cuero, a las chicas les encanta- dije mientras me encogía de hombros.

-Está bien –Se pasó la mano por el cabello una vez más y se acercó a la puerta- Te quiero -Dijo antes de cerrar.

-Yo no –Grite para que me escuchara.

***

Estábamos en la universidad y Kenneth me estaba ayudando con la clase de inglés, aunque no le estaba prestando nada de atención, tenía una idea de cómo decirle todo antes de que saliera huyendo.

- Alanna..... Alanna a Kenneth, yujuuuu

-¿Qué pasa?

-No has escuchado nada de lo que te he dicho –Comencé a mover el anillo de mi dedo, sino es ahora no es nunca.

-Tengo que decirte algo muy importante –Kenneth miro el gesto que hacía con el anillo pero no le dio mucha importancia y me volvió a mirar.

-Puedes decirme lo que sea.

-Necesito que me acompañes a un lugar -Dije levantándome de la silla

-Tengo clases –Señalo al salón al que tenía que entrar en 15 minutos.

-Esto es muy muy importante, enserio, por favor acompañame –Le suplique y le di mi mejor cara de perrito triste

-Tengo un hermano menor, esas caras no funcionan conmigo

Volteé los ojos y lo tome de la mano

-Solo levantate y vámonos

Fuimos al estacionamiento y nos adentramos a su auto. Le dije qué camino tomar y después unos 30 minutos conduciendo, le dije que se detuviera en un playa completamente sola, nos bajamos del auto y nos acercamos hacia el agua.

-Me gusta este lugar el agua es muy clara y no está llena de gente

-En realidad encontré este lugar por casualidad –Dije mirándolo, mientras el miraba el mar y el viento movía mi cabello- Cuando tenía 7 años me diagnosticaron cáncer en un pulmón.

Frunció el ceño y volteo a mirarme

-Alanna yo...

-Dejame terminar -Dije- Cuando tenía 10 años el médico me dijo que no iba a sobrevivir y que solo tenía unos cuantos meses, ese día salí de casa y camine hasta que ya no pude más, sentía que el pecho me ardía y cuando levante la cabeza estaba aquí en esta playa mirando las olas moverse, después de varias horas me encontró la policía y me regreso a casa.

-¿Cómo es posible que sigas, ya sabes... aquí?-frunció el ceño y yo tome aire, era este momento o nunca

-Mi familia viene de una alta generación de guerreros celtas, hay varias familias aquí en Niza, tienen una extraña creencia de que los dioses le dieron anillos mágicos con algún tipo de poder –Tome su musculoso brazo y fui bajando las manos hasta tocar las suyas –Y resulta que tienen que heredarlos sus hijos y los hijos de estos –Entrelace nuestras manos y el bajo la mirada con el ceño fruncido para ver mi mano en la suya, comencé a mover su anillo y volvió su mirada al mar - Es más extraño aun que esto sea cierto y que mi familia posea el más poderoso de todos.

Sentí que se estremeció antes de preguntarme- ¿Y cuál sería el más poderoso?

Me acerque a su oído, mi corazón completamente acelerado hacia lo que iba a hacer.

-El de la inmortalidad –Me aleje de él, solté su mano y me adentre al mar.

-ALANNA, Alanna sal esto no es gracioso.

Me adentre más y más hasta que no sentí la arena en mis pies, vi a Kenneth corriendo hacia mí así que me sumergí y deje que el agua entrara por mi boca y mi nariz hasta que todo se puso negro.

***

Mis pulmones ardían y sentí que mi garganta tenía algo atorado que quería salir, así que comencé a botar toda el agua que tenía dentro de esta, comencé a toser y fue cuando me percate en Kenneth. Estaba sentado a mis pies, completamente mojado y con lágrimas en los ojos, me miro y comenzó a arrastrarse por la arena lejos de mí negando.

-Es imposible –Decía una y otra vez

-Calmate, necesito que te calmes –Dije levantándome

-Es-tabas mu-mu-erta, yo tome tu- tu pulso –Tartamudeo- No tenías –Dijo en un susurro.

-Lo se y te lo explicare todo Kenneth pero necesito que confíes en mí –Dije mis lágrimas ya estaban saliendo de mis ojos y estaba tiritando del frio- Por favor –Dije en un susurro

Me miro y se levantó del piso y corrió hacia su auto.

"Bueno eso no era lo que yo esperaba" pensé

Tome mis rodillas y puse mi cabeza en ellas y comencé a llorar hasta que sentí algo en mis hombros, mire arriba y me encontré con Kenneth, que había puesto su chaqueta en mis hombro.

-Levantate te estas congelando

Asentí y me levanto, me pego a su pecho como si intentara protegerme mientras caminábamos hacia el auto, abrió mi puerta y entre y luego entro él en el puesto del conductor.

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Auto de kenneth

Anillo de InmortalidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora