Enomentuvalvë

Ojos color cafe

"si mencionas al diablo, se te puede aparecer"

Cuando era niño, y era la hora de dormir, cerca de mi cama se encontraba un ventana, la cual daba directo a la calle. Si te asomabas a los 8:30 de la noche, se podía ver a lo lejos a una mujer de cabellos canosos y ropa sucia, recogiendo en la basura de los demás, los tesoros para ella. Siempre que la veía, solía sentir un miedo terrible, me ocultaba debajo de las sabanas y rogaba no estar más ahí. Ahora cuando pienso en eso me doy cuenta de lo equivocado que estaba y de que eso que sentí no es nada comparado con el verdadero temor.

Nos dirigíamos al consultorio del doctor, esta se encuentra en la parte de atrás de las instalaciones. Un día le pregunte al doctor por que se encontraba en ese lugar, el simplemente respondió "se encuentra aquí para que nadie pueda escucharte gritar".

Llegamos a la entrada del consultorio. Una puerta negra con un letrero que dice SOLO PERSONAL AUTORIZADO se encuentra delante de nosotros.

-ya está, suerte pequeño- dijo como despedida Laura, y antes de que pueda contestarle algo se fue. "suerte, JA sin duda la necesitare" pensé. Di un largo suspiro y toque la puerta.

-adelante- se escuchó la voz del doctor Erick.

- Buenas tardes doctor, me dijo Laura que viniera por que se adelanto mi cita- Le dije cortésmente.

- ah, buenas Chris,Pasa siéntate, te estaba esperando- Me dijo con una sonrisa agradable.
Me sente en la silla que se encuentra enfrente del escritorio y empece a jugar con mis manos mientras el me observaba fijamente.
- bien Chris, hoy te haremos un analisis de sangre y tambien un pequeño experimentó en esos ojos tan hermosos que posees- me dijo- quítate la ropa y siéntate en la camilla, por favor.
No dije nada, símplemente hice lo que el me dijo, ya en la camilla le dije.
- ya estoy listo.
- Bien- dijo acercándose con sus utensilios. El consultorio o la cueva del diablo como todo lo demas es blanca,con el escritorio y ambas sillas del doctor, atrás de el se encuentra una vitrina llena de objetos de medicos,en la parte izquierda una camilla y atras de esta una puerta,no recuerdo bien que hay ahí. Las veces que me encontre ahí, estuve bastante drogado.
-Bien Chris, ya terminé de sacarte sangre, ahora te haré un pequeño chequeo mientras llega el suero- dijo el doctor Erick de una forma extraña.
Asenti, y derrepente sentí su mano acariciar mi pierna, y cada vez subia más, la piel se me puso de gallina.cerré los ojos.
-¿qué pasa Chris?, ¿te gusta?- me dijo el doctor con una voz melosa.
No le respondí,no podía. Trate de alejarlo de mi, poniendo mis manos en su pecho y empujandolo.
-shhh tranquilo,relájate- dijo con un susurro suave.
Con cuidado empezó a tocar mi pene.
-Ahh, noo- trate de ahogar un gemido.
No queria que escuchará mi voz, que estaba pasando,me estaba gustando. A diferencia de su carácter frío, sus manos calientes acariciaban mi cuerpo,una acariciaba mi pezón y la otra mi pene.
-Chris, eres hermoso-dijo el doctor empezando a lamer mi cuello.
- ah, ah- gemi. Sin poder detener mis manos, las cuales parecían tener vida propia, se dirigieron a su cabello, acariciandolo y jalandolo levemente.
-díos Chris, no importa que seas un chico, desprendes una sensualidad- dijo con voz ronca, acariciando mi cara, me acerqué a su perfecto rostro para besar sus labios, pero el mundo estuvo en contra,cuando tocaron la puerta. Agitado se alejo un poco de mi y respondió.
-¿ qué sucede?- dijo con voz ronca.
-Doctor, el suero que pidió, ya esta listo- dijo una voz gruesa de hombre.
- Bien- respondio secamente el doctor Erick.
Se alejo de la camilla sin dirigirme la mirada y abrio la puerta. Detrás se encontraba un hombre alto de una tez obscura, con rasgos fuertes y una mirada fría.
Le entrego un frasco con sustancia grisácea.
-Gracias- dijo el doctor Erick. Justo después cerro la puerta.
-¿ Quién era él?,¿ Qué es éso?- pregunte en voz baja.
El no me miro, solo me ignoro y se dirigio hacia una hojas en las cuale apunto algo. Depues volteo hacia mí. Me miro con ojos fríos otra vez.
- Lo que sucedió aqui no significa nada, no te equivoques, tu sigues siendo una simple rata de laboratorio- dijo serio mirandome a los ojos.
- ya lo se- dije bajito.
- Eso esta bien, el es Francis, el es un ayundante de los medicos, y este líquido es lo que pondré en tus ojos- dijo señalando la sustancia.
-Aunque pensando lo bien será mejor que te lo ponga mañana, ahora estas muy alterado y yo no tengo cabeza para esto- Dijo con voz cansada.
- Esta bien- dije mirando el piso. Mientras mas rapido me dejara ir mejor, me siento muy incómodo.
-Ahora vete. Tu cita sera a las 10:00 de la mañana, y te quedarás en observación- dijo con voz seca.
Ignorandome, señaló la puerta. Me baje de la camilla y me vestí casi corriendo salí del consultorio.
No se que le pasaba,el empezó.
Decidí mejor pensar en eso en otro momento. Lo que necesito ahora es bañarme y quitar la sensación de sus manos tocandome.
Después del baño. Elegí dormir y olvidar esos ojos cafés.

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Hola 😘😘😘Esto es nuevo para mi, espero que les guste el capítulo.
Este capitulo es dedicado a una pagina especial,que me apoyó en esto.
LORD Yaoi-Sama
Me encanta su pagina
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