-Ven niño. Aun no me has dicho tu nombre.
-Me llamo Gorim.
-Bien Gorim, ven, acércate, voy a mostrarte algo.
El joven se acercó y vio el mapa que tenía dos cruces, una era Ialdor, la otra, el nido del dragón.
El viejo le dijo:
-Muy bien, chico, si quieres llegar a su nido, tendrás que tomar esta ruta.
pero, sabes la defensa que llevan los dragones ¿no?
-No, porque
-Tienes suerte que te encontré chico, si no, habrías muerto. Los dragones solo se pueden matar con una espada sagrada, ya que, si son dañados por cualquier otra arma, sus heridas desaparecerían tan rápido como son creadas, es un método de defensa que muchos envidiamos.
-Y dónde encuentro...
-Te preguntarás cómo encontrar una espada sagrada, en esto puedo ayudarte, conoces la leyenda del rey Arturo- dice Gaius
-Claro que si, es el rey que estaba destinado a unir los 5 reinos
-Y sabes de su espada, Excalibur?
-Claro, espera ¿Sabes dónde está?
-Si que lo sé, niño
dijo de un tono arrogante.
Gaius se acercó al mapa y marcó una tercera cruz que estaba en el camino para llegar al nido.
Gaius le contó a Gorim que deberá pasar por el valle de Cohr y el reino de Antalis, donde encontrarás una cueva,en la cual se esconde Excalibur. El chico comenzó a caminar en dirección a la puerta, pero el anciano lo detuvo.
-Sé que quieres partir ya, pero aun no has tomado tu desayuno.
-Lo siento lo olvide completamente.
