Esa sangre que corre por sus venas sube fluyendo hasta su rostro,
en colores escapando por el brillo de sus ojos.Ella no puede evitar sonrojarse al verlo o al pensar en él,
y es que pocos entre muchos la han hecho sentir igual.Ella no quiere que él lo sepa,
pero él lo descubre cada vez que la ve.Él no se atreve a decirle lo que siente,
y ella es muy tímida para contarle.
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Poesías del alma
RomanceDe esas poesías que escribimos de vez en cuando, y que he decidido compartir