My Divergence

Capitulo 1: Soy Divergente

Tengo un recuerdo de hace años. Cuando yo tendría unos ocho años.

Estaba jugando en la calle con otros niños de Concordia. Bueno ellos jugaban,  yo solo miraba como se divertían. Nunca fui buena haciendo amigos.

Una de las niñas se acercó a pedirme que le ayudara a dar cuerda, que solo eran 2 y no podían jugar a saltar a la comba. Le dije que no. No debí hacerlo.

La niña se fue llorando hacia su amiga y rápidamente los demás se le unieron. De repente una de las otras niñas se acercó a mí y me dijo que le pidiera disculpas. Sabía que debía hacerlo pero yo... no lo hice.

Mi manera de actuar era conflictiva ya que no colaboraba. No era una buena actitud de Concordia.

 "Los demás niños de Concordia tienen razón. No eres una buena amiga, no me extraña que no te quieran. ¿Cómo puedes portarte tan mal? No tienes corazón".

Esas últimas palabras que dijo se clavaron a fuego en mi piel.                         

Yo no era una mala persona, solo era una chiquilla que prefería estar apartada y que no estaba acostumbrada a hacer amigos. Pero recuerdo como la empuje y callo tan fuerte contra el suelo que creí que se había dado contra una piedra por el golpe seco que se escuchó.

Al siguiente minuto, mi madre me estaba arrastrando de la mano hacia casa.

Al llegar me miró con una mirada de decepción que llegue a tener miedo. Negó con la cabeza, me hizo juntar las manos delante de mí y acto seguido las golpeó fuertemente.

"Lo siento, pero debes aprender aunque sea por las malas que lo que has hecho está mal." Me dijo.

Nunca antes me había pegado. Supongo que por la simple razón que pegar va poco con el espíritu Concordia.

Desde ese momento nunca volvió a mirarme como antes. Deje de ser su niña para convertirme en una deshonra, alguien conflictivo. La oveja negra de mi familia.

No sé como pero supongo que por no crear problemas mis hermanos hicieron los mismo. Los únicos que me seguían tratando como siempre eran mi padre y mi hermano mayor, Ashton, claro que solo cuando estábamos a solas.

Y todo fue a peor después de que Ashton se fuera, pero eso es algo que no voy a tocar por ahora.

Termino de mirarme al espejo de la sala de mi casa. Mi pelo castaño oscuro cae libre hasta mi pecho, es bastante salvaje y no encuentro manera de dominarlo así que simplemente me recojo la parte de delante en dos trenzas que se unen detrás de mi cabeza. Visto la habitual ropa de mi Facción. En este caso una camisa roja algo suelta con unas pantalones estilo tejanos de color rojo al igual que mi camisa.

Salgo de casa y me subo a uno de los camiones que nos llevan a la escuela. Justo a mi lado se sienta mi vecino Josh. Tiene mi misma edad y recuerdo que antes de irse mi hermano él y su familia solían cenar con nosotros muchos fines de semana. Aunque, no me extraña que dejarán de venir, después de todo siempre está mal visto que alguién abandone su facción. 

Hoy nos hacen la prueba de aptitud. No puedo negar no estar nerviosa. Pero es probable que hoy confirmen uno de mis mayores temores. Mi Divergencia.

Fue después de esa pelea de cuando era pequeña, empecé a ver las cosas de otra manera. A darme cuenta de cosas.

No pensaba como una Concordia, sin embargo admiraba otras facciones. La manera de decir lo que piensan sin importar como de los Sinceridad, la inteligencia de Sabiduría, la desenfrenada vida de los Intrepidez, y bueno siempre he pensado que Abnegación en el fondo no es tan diferente de Concordia así que tampoco creo que valga para eso.