De vuelta a tu corazón

Parte 7 Soluciones y un chico feliz.

Desperté gracias al sonido de la alarma que marcaba las 7:00am, me levanté con mi típica poca emoción para trabajar aunque también sabía que esta vez sería diferente, ayudar a la persona que quieres es todo un privilegio, asi que me animé, fui por un cafe y tome una ducha, abrí mi armario escogí un Jean negro, cinturón marrón fino, camisa de vestir manga larga de color gris que acomode por dentro del Jean, me arregle el cabello como de costumbre y me calze unas zapatillas negras, cuando estuve lista tome el celular para averiguar la hora, al mismo tiempo escuche la corneta del auto -¡Llegó! -Dije para mi- Abrí la puerta y estaba allí plantado con su atuendo de trabajo que lo hacía siempre más bello de lo que ya era.
-¡Toda una ejecutiva! -Dijo al verme- ¿A donde se dirige señorita? -Bromeaba mientras me abría la puerta de copiloto-
-Houston Business Development Inc' Por favor. -Dije con dificultad pues no se me daba del todo bien el idioma.-
El reía a carcajadas burlándose.

Manejó hasta que finalmente llegamos a las oficinas, a medida que nos dirigimos a la suya saludaba a todos, yo lo miraba orgullosa, sin duda se habia convertido en una persona exitosa y respetada, al llegar me encontré con una oficina de aproximadamente unos 3×5 metros cuadrados, toda pintada de blanco, la llenaban una mesa en L con infinidades de papeles, un teléfono que en cuanto entró empezó a sonar, unas fotos de su familia en la pared y como recién puesta la foto familiar que me incluía en la boda de Vale, me paré justo enfrente de ella para verla mejor.
-Eh, es que ya te consideramos parte de la familia- Dijo en tono tímido rascándose la cabeza.
-Gracias, me alegra saber eso -Dije guiñandole un ojo para calmar sus nervios

-Bueno -Froto sus manos- ¿Lista para trabajar?
-Creo que a eso vine, ¿o no?
-Tienes razón, me encantaría tenerte un poco mas cerca pero te necesitan en otro departamento, sigueme.

Mientras nos dirigiamos a la oficina en la que trabajaria me presentó a todos como "la solución al problema que surgió recién en el departamento de contabilidad", trataba de asentir a lo que decia aunque realmente no sabia que significa lo que decia.

Finalmente llegamos, nos esperaban 4 chicas mas o menos de mi edad.
-Chicas -empezó el- Ella es Jasmine, Jasmine -se dirigio a mi- Ellas son Jennifer, Ashley, Gina y Veronica, conforman el departamento de contabilidad, estaras trabajando con ellas en un problema que recién surgio, ellas te explicaran un poco.
-¡Salvación! - Exclamó Verónica.
-Pasa Adelante Jasmine, ese de alla es tu lugar, ponte cómoda -Dijo Ernie-
Me dejo entre ellas y se marchó, lucia concentrado y eso me encantaba.

Mi puesto se encontraba cerca de la puerta, limpio y arreglado como si esperara por mi, solo tenía una silla reclinable, una computadora y listo. Me senté en la silla con el propósito de encender la PC cuando escuché
-Jasmine, ¿De donde vienes? ¿Que eres de Ernie que confía tanto en ti? -pensé muy bien mi respuesta no queria dar detalles de la situación, ni de lo que realmente hacia aqui.
-Vengo de Venezuela y somos amigos de hace bastante.
-¿Venezuela? ¿En serio? ¿Que te hace pensar que tu, una desconocida que viene de un país con bajos recursos puedes enseñarnos algo o siquiera solucionar algo que llevamos meses sin resolver -Comentó irónicamente Jennifer-
-Pues, si Ernie le dio la oportunidad es porque sabe algo que quizás nosotras no -Aclaró Verónica-
Le di una media sonrisa y me di vuelta de nuevo para terminar de encender la PC, Verónica se dirige a mi con unos papeles
-Este es el problema que presentamos, una empresa exportadora a la cual le vendemos ha decidido romper relaciones con nosotros por el mal servicio que le han prestado nuestros proveedores, pero perder un cliente significa perder muchas cantidades de dinero, Ernie quería que como grupo administrativo presentaremos un informe en el que le pudiéramos indicar que tan bajo seria el total de ingresos si este comprador se retira, pero hay muchos fondos bloqueados y no damos con la clave de desbloqueo y sólo nosotros la sabíamos.
-¿No han pensado en hacerle una mejor propuesta a ese cliente y en vez de perderlo brindarle un mejor servicio quizas con otro proveedor? -Dije después de prestar la suficiente atención al problema que ella me mencionaba-
-No lo habíamos pensado, como nos encargamos de cuentas esa fue la tarea que nos encargó el Sr. Ernie y eso intentamos hacer.
-No se limiten -Dije- Todas las opiniones son valiosas en momentos asi, Verónica, tenemos dos cosas que resolver ahora, toma nota.

Saco si libreta y comenzó a hacer apuntes, las otras chicas no se acercaron, tecleaban sus máquinas y de vez en vez nos miraban de reojo, mi corazón latía con fuerza, me encantaba dirigir, creo que por eso estaba aquí, Ernie lo sabía muy bien, pero llegar de pronto a hacerlo con gente que no conocía era un poco intimidante, aún así salvar un cliente se habia hecho, más que una molestia, un fuerte con muchas batallas ganadas.
-Esta todo listo para empezar - Dijo Veronica-
-Excelente, entonces a trabajar -Respondí entusiasmada-
Empecé a delegar cargos, ahora éramos 5 y con mucho trabajo que hacer, decidi trabajar más de cerca con Verónica pues era la mas atenta y por lo tanto la más interesada, Ashley y Gina se encargarian de buscar nuevos proveedores con mejores ofertas y presentar los resultados a fin de semana, En el caso de Jeniffer su fuerte era la telefonía asi que se encargó de retener al cliente mediante llamadas por lo menos 30 dias y mantener al tanto a Ernie de los trabajos realizados.

Teníamos solo 30 dias para ganar o perder un cliente muy influyente, justo el tiempo que duraría en el pais, empecé a pensar que Ernie sabia que podia hacer esto justo en el tiempo oportuno, en el instante baje las escaleras junto con Verónica y nos dirigimos hacia la oficina de Ernie.
- ¡Chicas! -Se asombro al vernos- ¿A que debo su visita?
-Señor -Habló Verónica- La Srta. Jasmine nos ha dado una propuesta de retener al cliente por 30 dias con el propósito de salvarlo y mantenerlo como cliente de la compañía. -Verónica era seria al trabajar-
-¡Grandioso! -Grito Ernie dando vueltas de manera exagerada en su asiento- Tienen mi aprobación, pueden iniciar.
Verónica sonrió de oreja a oreja por lo visto no conocía muy bien a Ernie, lo que me dio a entender que no llevaba mucho tiempo en la empresa.

Sali de la oficina detrás de ella y Ernie tomó mi brazo y dijo:
- Sabia que podías con eso -me guiño un ojo- No pude evitar sonrojarme pero para que nadie lo notara salí inmediatamente con mi cara sería pero con mi corazón alborotado, solo el lograba esa sensación.

El dia pasó demasiado rápido, siempre pasaba eso cuando trabajaba sin parar, me sorprendió mirar a la puerta y encontrarme con unos ojos cafés observándome trabajar, me detuve a observarlo sonriendo cuando me hace unas señas con sus manos mostrándome su reloj, tomé mi celular para ver la hora y eran casi las 6:00pm, abrí los ojos de par en par recordando que teníamos un compromiso luego, guarde todo, apague la PC y sali encontrándome con Ernie, quien me esperaba revisando su teléfono, en cuanto me vio lo guardo y nos dirigimos a la salida.
-¿Que tal tu dia? -Pregunta sonriente-
-Excelente, Gracias por esta oportunidad -Se acerco y me susurró al oido-
-Un truco para tenerte cerca- Baje el rostro para que no notara lo roja que me había puesto, el solo sonreía pícaro.

Me dejo en mi actual hogar, no sin antes mencionar que pasaba por mi a las 8:00pm -Mi cuerpo me pedia descansar, anhelaba tomar un baño largo, un te caliente y dormir, pero mi corazón pedía estar a su lado un rato mas asi que decidí alistarme.

*El resto del dia se los cuento en un siguiente capitulo, gracias por leer, no olviden votar, y comenten si les va gustando la historia, seria una motivación extra*