El Mundo Subconsciente

Déjà vu

¿Nunca habéis tenido la sensación de hacer algo que creeis que ya ha pasado?
Pues algo parecido me pasó al principio de esta locura.
Al principio, yo sonaba lo que me había ocurrido durante el día, al principio sólo porciones del sueño, luego cada vez más hasta que sonaba el día entero.
Claro, yo repetía mis acciones, todas y cada una de ellas. El problema comenzó el día en el que me decidí a pedirle matrimonio a mi novia.
Pero antes de llegar a eso quiero contar quien soy, o quien fuí más bien puesto que no se quien soy hoy en día.

Mi nombre es Jayden Quill, nacido en un pequeño pueblo cerca de una pequeña ciudad en España y criado en el.
Estudié tecnología en esa ciudad y tras acabar allí fuí a Madrid a seguir estudiando.
Soy un chico de 25 años,ni muy alto ni muy fuerte, de cabello rizado y oscuro, ojos avellana y un bigote y perilla estilo pirata.
Mi familia cercana se compone de mi hermano Daxter el cual vive y estudia en Barcelona y mis padres los cuales viven en el pueblo que me crié.
Tengo una novia, Nadia, 23 años, vive conmigo. Salgo con ella desde que tenía 17 y ella 15.
Ella es castaña de pelo ondulado, cejas gruesas, sonrisa encantadora, algo más alta que yo a mi pesar.
Nos va bien en la vida hasta este punto.
Aquí es donde todo empezó a cambiar a mejor y a su vez a peor.
Mis "déjà vu" comenzaron cuando empecé a trabajar en un nuevo proyecto. La empresa para la que trabajaba me puso al frente en la investigación de un artilugio mediante el cual los mudos pudiesen hablar casi como una persona normal.
Poco a poco mis sueños se completaban más con el día anterior hasta que comencé a soñar literalmente lo que ya ha vivido.
Al principio no me importaba; simplemente repasaba lo que había hecho el mismo día. Nunca tuve la curiosidad de hacer algo diferente.

Finalmente llegó el día.
Me dieron las vacaciones y me llevé a Nadia a París, la ciudad del amor. Ella la había estado allí un par de veces antes pero esta iba a ser totalmente distinta. Esta vez le iba a proponer matrimonio.

Tenía todo el día y toda la noche pensados.
Nada más llegar a París iríamos al hotel a dejar las cosas y luego comeríamos en un buen restaurante,
Visitaríamos todas las tiendas que ella quisiese ver y entrada ya la tarde daríamos un paseo en barco por el Sena.
Cenaríamos en otro restaurante y por la noche, sobre la torre eifel, le pediría matrimonio.
Ese era el plan. El problema es que el Plan funcionó y a su vez fracasó...