Cada vez hablamos más. Nos miramos más. Nos entendemos más.
Ya es verano y estoy en el pueblo de mi abuela. Ayer a las 12 fui a ver las estrellas, y la verdad que mereció muchísimo la pena. Vi más estrellas que en toda mi vida. Me quede más de media hora tumbada observando en silencio.
Hoy, antes de ir a ver estrellas, hemos estado ya casi más de dos o tres horas hablando, y es que es un encanto. Me dice cosas preciosas que me deja sin palabras.
Cuando le dije que estaba viendo las estrellas me dijo que yo ya era una. Eso me llegó al corazón. Aunque fuera una pequeña tontería, fue bonito de verdad. Me dice las cosas más bonitas que me han dicho nunca. Si eligiera a algún chico como mejor amigo no dudaría en elegirlo. Tiene todo lo que debe tener un mejor amigo. Y para mi es mi mejor amigo, aunque no lo digamos oficialmente.
Tenemos una conexión especial. De esas que sólo tienen los mejores amigos o las parejas.
Lo único que nos falta es quedar mas, vernos más. Y hoy hemos pensado en los planes perfectos que ojalá algun día se cumplan. El primero de todos es por supuesto comer pizza juntos. Otro es ir a la playa. El tercero jugar a la nintendo o recordar series y pelis de la infancia. El cuarto ver las estrellas. Y yo tengo millones más en mi mente. Ojalá al menos uno se haga realidad. Estar a su lado es mágico. Y único. Como el.
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In Between
Teen Fiction¿Que hacer cuando tienes un amigo especial? ¿Sera tu mejor amigo, o lo mejor que te ha pasado en la vida?
